Habla el director ejecutivo de Ruba, reconocido entre los 20 directores más confiables en México, sobre cómo la visión cristiana de la empresa los lleva al éxito.
Claudia Iveth Robles
Jesús Sandoval, un miembro de la asociación de laicos de los Cruzados de Cristo Rey, director de la empresa Ruba, fue reconocido como uno de los 20 directores ejecutivos de empresas más confiables, en un premio que otorga la organización Great Place to Work (GPTW).
En este listado figuró además de Jesús Sandoval, Laura Muñoz, directora general de supermercados S-Mart, ambas empresas chihuahuenses con matriz en Ciudad Juárez.
En entrevista con Periódico Presencia, Jesús Sandoval compartió cómo la vision cristiana que ha adoptado la empresa Ruba la ha llevado a figurar desde hace trece años, en la lista de las mejores sitos para trabajar, que igualmente otorga este organismo Great Place to Work.
Aquí la entrevista:
¿Qué representa para usted hacer recibido este reconocimiento como uno de mejores directores de empresa en México y qué representa para la empresa?
Primero me entusiasma mucho, porque la traducción del premio es: los más confiables directores de empresas en nuestro país, y ahorita que estamos en una crisis de valores en el mundo y en México no es la excepción, y se da en todos los sectores en el sector público y en el sector privado, y que haya instituciones como el Great Place to Work (que mida) la confiabilidad, la confianza -un valor muy importante-, nos llena de entusiasmo. Pero al mismo tiempo nos damos cuenta de que esto es un reconocimiento a la institución. Tenemos 37 años como una empresa con un enfoque basado en la persona; es más, hay que decirlo, y más que si es para el Periódico Presencia: nuestra filosofía empresarial en Ruba está inspirada en la Doctrina Social Católica, o sea, tenemos una concepción cristiana de la vida y tenemos a una concepción cristiana de la empresa, y en esa concepción cristiana de la empresa, tenemos un código de valores, un código de ética. Fomentamos los valores cristianos, los valores fundamentales del ser humano, los valores de familia y este reconocimiento viene siendo a esa labor que se hizo desde el fundador de esta empresa, don Enrique Terrazas Torres. Un empresario chihuahuense fue el fundador de la empresa que está en Chihuahua y es presidente honorario del consejo. Ahorita (el presidente) es Luis Enrique Terrazas y un servidor soy el director general, pero además soy socio de la empresa, y no sólo un servidor, sino varios de los funcionarios de la empresa somos socios, y ese el primer principio o la primera característica de Ruba. Dicen que ya es una corriente ahorita en el mundo que el capital es para compartirse, entonces Ruba, desde sus fundadores comparten el capital, y nos invitan no nada más como colaboradores sino como socios de la empresa. Y desde ahí empieza ese enfoque humano o ese enfoque cristiano de que todos somos iguales en cuanto a dignidad, porque todos somos hijos de Dios, fuimos hechos a su imagen y semejanza y por lo tanto el que ocupemos una posición de responsabilidad es una situación absolutamente circunstancial.
¿Cómo ha logrado este nivel de confiabilidad aquí en la empresa?
Ha sido simplemente una cuestión de reciprocidad: los fundadores de la empresa, los accionista mayoritarios depositaron la confianza en un servidor hace 31 años en el grupo empresarial, hace 19 años en Ruba, y lo único que he hecho es depositar esa misma confianza en todo nuestro equipo de colaboradores. Tenemos 18 sucursales y los directores de plaza son egresados de las filas de Ruba, tenemos un equipo corporativo de aproximadamente 8 miembros, todos egresados de las filas de Ruba. Nuestra gente, con la confianza otorgada y la persistente aplicación, llega a ocupar los puestos más importantes de la empresa… entonces un servidor ha depositado en el equipo esa misma confianza, por supuesto, porque así somos los seres humanos, tenemos ese potencial, y el equipo ha desarrollado su máximo potencial.
¿En qué forma su fe y su formación católica lo han llevado a este reconocimiento?
Para mí es fundamental, tuve la fortuna de nacer y crecer en una familia cristiana y tuve la fortuna de encontrarme en el camino de mi vida con gente que comulga con esos principios, ya en el medio empresarial, y yo creo que el hecho de que tu compartas el capital, que sea la empresa una de las empresas que por trece años consecutivos aparece como de las mejores empresas para trabajar en México por el Great Place to Work, desde mi punto de vista, es por la concepción humanista, concebir que lo más importante de la empresa es la persona. Acuérdense que las empresas son hechas por el hombre y para el hombre y para el servicio del ser humano, entonces si tú pones a la persona como centro, y además le das una dimensión trascendente, entonces te das cuenta de que todos, absolutamente todos podemos desarrollarnos, y que las empresas pueden generar un bien enorme. Ruba es la cuarta desarrolladora de vivienda más grande del país, entonces tenemos más de mil colaboradores directos, pero tenemos miles de colaboradores indirectos, que son los que construyen las casas, entonces el bien que se derrama a través de la empresa es enorme. Yo fui al catecismo y aprendí que nuestra misión en esta vida es amar y servir a Dios en esta mundo, para después verlo y gozarlo en el otro, pues con esa visión, sabiendo que somos temporales, creo que eso ayuda a darle un sentido trascendente a todo lo que haces. Y aquí en Ruba nosotros tratamos de darle un sentido trascendente a todo lo que hacemos en nuestra labor diaria.
Desde su formación, ¿qué características cree que debe tener un director y una empresa considerada confiable?
Yo creo que lo principal es que la empresa cumpla su misión, que es dar un valor agregado a la sociedad. Nuestra misión es contribuir a elevar la calidad de vida de las ciudades donde tenemos presencia a través de desarrollos integrales. Lo primero es que la empresa tenga una misión clara de qué es lo que tiene que hacer, y esa misión tiene que tener un bien hacia la sociedad. Segundo, yo creo que tiene que haber congruencia, cuando tiene que tener unos cimientos, unos valores que hagan que esta empresa trascienda, independientemente del director que esté en turno, entonces la segunda es que haya una visión, una profesionalización de las empresas sabiéndonos temporales, pero que la institución puede trascender a nuestra temporalidad. Y tercero, que sean congruentes en todos los sentidos. Ser consistentes y congruentes ante nuestros inversionistas, nos debemos a ellos; ante nuestros colaboradores, que son la parte fundamental de la empresa, pero también tenemos que ser congruentes hacia nuestra ciudad y hacia nuestras autoridades. Una empresa tiene que dar y tiene que ser ejemplo en cuanto a promover y vivir los valores fundamentales. La empresa tiene que hacer las cosas con un contenido ético en todas sus labores y respetar las leyes y los reglamentos en el ramo en el que se encuentra.
¿Cómo anima este hecho a otros a buscar un ambiente más confiable y humanista en la empresa?
Creo que esa es una labor muy interesante que hay que reconocer del Great Place to Work, un organismo internacional que reconoce a las empresas que tienen este enfoque hacia las personas, y el hecho de que se reconozca a este tipo de empresas debe animar a muchos más en el sentido de que sí es rentable tener este enfoque humanista, porque también hay que hacer eso. Las empresas son para generar riqueza y para repartir esa riqueza y definitivamente Ruba es una empresa muy rentable y es una empresa muy exitosa, y eso creemos que debe animar a otros a que, dando un enfoque humanista a la administración de la empresa, inclusive a compartir el capital, que es algo rarísimo, trae beneficios mayores. Ruba seguramente no hubiera crecido como ha crecido si no tuviera esa filosofía, con un fundamento, con un código de ética o con una serie de valores si no tuviera esta parte de invitarnos a todos al negocio.
Estamos prácticamente ya en la fiesta de Cristo Rey ¿cómo se puede lograr que Cristo reine en el ámbito laboral de la empresa?
Tengo que confesar que pertenezco a la familia de los Cruzados de Cristo Rey y que una de las cosas que más me entusiasma de esta agrupación religiosa, es la misión que tenemos de hacer que Cristo reine en todos los ámbitos en los que nos desarrollamos, entonces un servidor como miembro de la familia de los Cruzados de Cristo Rey, ha procurado, primero, que Cristo reine en mi corazón, en mi persona, lo he tratado de llevar a mis hijos estoy felizmente casado, tengo treinta años de casado, cuatro hijos y siento que ahí en la familia, con la gracia de Dios, hemos logrado la presencia, o que reine Jesús en nuestras vidas. Te voy a compartir que nuestra gente se reúne todos los días a hacer oración en la mañana a ofrecer sus actividades dentro de la empresa, hacemos por supuesto misas de acción de gracias, hacemos bendición de nuestros fraccionamientos y abiertamente, porque hay libertad religiosa en México, y respetamos a la gente que no tiene estas creencias. Sin embargo, como los principales directivos comulgamos con esta visión cristiana de la vida, la hemos llevado hasta las últimas consecuencias y promovemos esta visión. Creemos que al hacer la oración, al ofrecer todas nuestras actividades, estamos permeando todas nuestras actividades con Cristo como Rey del Universo, de nuestras familias y de nuestras empresas. Creo que esta sociedad está muy necesitada de que volvamos a los valores fundamentales. Vemos cosas que no nos gustan en todos los ámbitos en la sociedad misma la violencia la criminalidad, la corrupción en los ámbitos públicos y privados y pues también hace falta que haya una corriente en que estemos promoviendo que las cosas pueden ser diferentes.