En el marco del Jubileo de la Misericordia, el pasado viernes 11 y sábado 12 de marzo, fieles de las diferentes comunidades vivieron un encuentro con el Señor a través de la inciativa “24 horas de adoración eucarística y reconciliación”, que se realizó en la diócesis a instancias del Papa Francisco.
Esos mismos días en la Santa Sede y en muchas diócesis del Mundo, se realizó la jornada que incluyó confesiones, adoración eucarística y reflexiones.
En algunas comunidades, se expuso el Santísimo y se entonaron cantos de meditación y adoración, mientras sacerdotes impartieron el Sacramento de la Reconciliación.
“Es una iniciativa que nos ayuda a vivir en ese amor y en esa misericordia que el Señor nos ofrece y es una bendición” dijo el padre Jesús Ramírez vicario de Catedral y quien impartió el sacramento junto con otros sacerdotes del Decanato de Guadalupe.
“Nos da mucha alegría poder unirnos al sentir de la misericordia de Dios, la gente ha respondido, y están en esa sintonía, con el corazón dispuesto, sobre todo por los días santos que se acercan y preparándose para recibir a Jesús resucitado en sus corazones y en sus almas”, dijo por su parte el padre Felipe de Jesús Juárez.
“Es sorprendente cómo vienen después de tantos años y Dios está haciendo algo en el corazón de cada uno de ellos”, agregó el padre Ramírez sobre los penitentes.
El padre Felipe dijo que a través del Sacramento de la Reconciliación, el Señor “nos sigue amando, levantando, regenerando y nos da la vida eterna”.
Previo al inicio de las confesiones, los sacerdotes del decanato invitaron a los fieles a vivir unidos a Dios y al misterio del Señor, a abrir el corazón el alma y dejarse llenar de Él para ser transformados.
La iniciativa “24 horas para el Señor” se realizó en toda la diócesis. Cada decanato programó confesiones comunitarias como un espacio para la reconciliación y la misericordia. También hubo Adoración eucarística toda la noche en algunas parroquias, principalmente en aquellas que tienen adoración perpetua.
Testimonios
“Hace poco que me confesé, pero quise aprovechar la oportunidad de que vivieran más sacerdotes. Valoramos mucho este servicio, porque así alcanzamos a reconciliarnos todos”
Yolanda Larios
“Soy monaguillo, hace como dos meses que no me confieso. Para mí el Sacramento de la Reconciliación es para seguir en comunión con todos y para sentirte bien con Dios. Me siento con pena, pero también alegre porque sabes que Dios te perdono”.
Omar Hernández
13 años
“A veces uno comete errores, pero se siente uno tranquilo después de confesarse y trata de no volverlo a hacer. Esta jornada me invita a vivir bien con mi familia y ser mejor y con los demás.»
Teresa Reyna Flores
“Sentí que necesitaba la gracia de Dios y sentí el llamado a reconciliarme. Esta iniciativa del Santo Padre es muy buena porque nos invita a estar en la presencia del Padre… Me siento renovado, sé que soy débil y en cada reconciliación siento el amor de Dios”
Ángel Felipe Sáenz
23 años
“Ahora que me confesé me siento más “livianito”, mejor en la amistad con Dios. Reflexionar en ese silencio es algo muy bonito”.
David Galindo