Habla la autora del boceto y muralista sobre su inspiración para realizar este trabajo premiado que ya se observa en la barda del Seminario.
Claudia Iveth Robles
Ya se encuentra listo el mural del papa realizado para conmemorar el segundo aniversario de la visita del Papa Francisco a Ciudad Juárez el pasado febrero de 2016
El mural se puede apreciar en una de las bardas del Seminario Conciliar que da a la calle Pedro Rosales de León. Fue pintado por su autora, Teresa Pérez, quien compitió el pasado mes de febrero con esta propuesta y ganó el derecho a que su idea quede plasmada en la Casa de Formación Sacerdotal.
La idea de colocar este mural de manera permanente en las afueras del Seminario, es que toda persona pueda admirarlo y recordar la visita histórica del vicario de Cristo a Ciudad Juárez, explicó la autora.
En entrevista, compartió a Presencia que se siente bendecida y agradecida con Dios, con su familia y con el Seminario, quienes han hecho posible vivir esta “maravillosa oportunidad”.
Mensajera de amor
Recordó que al ver la convocatoria del concurso pensó en participar, pero luego lo olvidó y para cuando volvió a ver la invitación en Periódico Presencia, se dio cuenta que al siguiente día se cerraba la convocatoria.
Se animó e inmediatamente se puso a dibujar. Esa misma noche envió su boceto.
«Creo que Dios me invitó a ser mensajera de su amor a través de esta experiencia; el haber vivido la visita del Papa Francisco con intensidad me inspiró a dibujar mi boceto, pues yo decía que quería estar ahí aunque sólo viera su sombra, y aunque prácticamente así pasó, fue muy emocionante disfrutar cada momento”, dijo.
Luego de que su trabajo fue seleccionado como primer lugar, se dio cuenta de que hacía falta agregar unos detalles, así que realizó algunas modificaciones.
Fue ella misma, con la ayuda de su esposo Eduardo Muñoz, quien pintó el mural en el exterior, proceso que le llevó unos 10 días intercalados, pues en ocasiones por el aire o lluvia no fue posible pintar.
Teresa relató que cada día hacían una oración antes de comenzar a trabajar, y algunas veces sus dos hijos les acompañaban. Uno de ellos es seminarista y le ayudó a pintar, y el menor es estudiante de diseño digital y le asesoró con algunas ideas.
“Fue un trabajo en familia”, expresó orgullosa la autora, quien incluso ya fue invitada en las redes sociales, a pintar un mural en Mérida, Yucatán, lo que ve también como una gran bendición.
Con este mural Teresa Pérez espera dejar en la comunidad el mensaje de paz y esperanza que el Papa Francisco trajo con su visita. Y aunque es el primer mural que realiza de su propia mano, no puede dejar de agradecer a Dios por la bendición que representa para ella y para su familia.