Psicoterapeuta habla sobre los desafíos que hoy se enfrentan con estos muchachos nacidos alrededor del año 2000…
Presencia
Aunque los muchachos y muchachas nacidos a finales de la década de los 90’s e inicio de los 2000 son los que tienden más a la depresión, también son quienes más buscan ayuda psicológica, en medio de las realidades de estrés que les ha tocado vivir.
Así lo explica en entrevista el maestro Francisco Luján Hernández, especialista en psicoterapia cognitivo-conductual quien aborda desde su experiencia los retos que se enfrentan con esta generación a la que se ha llamado, despectivamente -como él mismo lo indica-, “generación de cristal”.
Aquí la entrevista.
1.¿Cuáles son las características más destacadas de la llamada Generación Z?
En mi caso particular, procuro ser cuidadoso de no encasillar a los y las jóvenes dentro de categorías como estas, que más que ayudar a comprender historias de vida y dinámicas sociales complejas, terminan creando prejuicios alrededor de una forma de ser adolescente en nuestros tiempos actuales. Me parece importante recordar que cada generación hace lo que puede con lo que tiene, ellos y ellas son el resultado de lo que hizo o deja la generación anterior. También, parece ser que no hay consenso acerca de los rangos de edad en los que se categorizan millenials o centenials, o baby boomers.
Me referiré como centenials o generación Z a los y las jóvenes que nacieron a finales de los 90’s y principios de los 2000’s. Las características que se le suelen atribuir a los centenials es que están bastante motivados por el dinero, muestran un gran interés por cambiar al mundo, parece ser que les interesa más la seguridad que la riqueza. Buscan una sociedad más equitativa y sobre todo, quieren salvaguardar el medio ambiente. Aparentemente están orientados a actuar en beneficio de los demás, por lo que suelen centrarse intensamente en no defraudar a otros. También, parece ser que valoran la educación más que generaciones anteriores. Sumado a lo anterior, desde el día que nacieron tienen Internet, por lo que tienen acceso a muchísima información. Están bastante familiarizados con el mundo digital, crecieron en un entorno digital y lo dominan.
- En el aspecto emocional ¿Cómo son los Gen Z? …según estudios es preocupante en ellos el tema de la ansiedad y depresión ¿Por qué?
En mi experiencia, la generación Z es la más deprimida. Aún así, son quienes más tendencia tienen a buscar apoyo o tratamiento psicológico para la depresión o la ansiedad, en relación a personas de generaciones anteriores. En México y Latinoamérica, la generación Z se enfrenta a un estrés crónico debido a muchos factores que afectan a su entorno, como la violencia con armas de fuego, el acoso y los abusos, la preocupación por la inestabilidad financiera, la política e incluso las redes sociales. El acceso a tanta información desde el Internet agrega mayor presión a sus vidas y deja a algunos luchando con intensos sentimientos de aislamiento, soledad y desesperanza.
- ¿Cómo se debería abordar este tema con los muchachos y muchachas de esta generación, luego de lo que se ha vivido con la pandemia?
Respecto a la pandemia, todas las personas y sociedades estamos en una curva de aprendizaje sobre cómo manejarla y cómo solucionar los conflictos individuales y sociales que esta coyuntura va dejando al descubierto. Una recomendación, no sólo para los centenials, sino para todos nosotros, es hablar de lo que sentimos. Una premisa en salud mental es que hablar de nuestras emociones placenteras o displacenteras sana por cuenta propia, sobre todo porque al hablar de nuestras emociones generamos conexiones con otras personas. Nosotros sanamos (o enfermamos) en relación con otros. Un recordatorio que deja la pandemia -psicólogos y psicólogas ya sabíamos de esto- es que somos vulnerables y es importante aceptar nuestra vulnerabilidad. Paradójicamente, de ahí surgen nuestras más grandes fortalezas y nuestra resiliencia. Mi recomendación: hablemos con los y las adolescentes de sus emociones y de las nuestras.
- En el tema del suicidio ¿Cuáles son las preocupaciones y cómo abordarlas desde la familia, por ejemplo?
El suicidio aparece en la mente de las personas cuando están sufriendo, aparece como una opción para deshacerse del dolor, y en nuestra sociedad existe el mito de que hablar del suicidio puede amplificar las intenciones suicidas de las personas. Gracias a la investigación en este campo, sabemos que ocurre todo lo contrario: hablar del suicidio y del malestar que experimenta la persona que lo contempla, disminuye las posibilidades de que suceda. Hablar de lo que sentimos es vital. Junto a esto, es importante hablar del tema del suicidio y acercarnos con profesionales de salud mental para recibir orientación y tratamiento oportuno.
- ¿Qué es lo positivo de esta generación?
Desde mi punto de vista, valoro muchísimo su búsqueda de un mundo más justo.
- ¿Cómo influyen estas personas en las nuevas generaciones… qué les aportan?
Por un lado, hay personas que se sienten muy irritadas por la manera en que esta generación alza la voz. Les han llamado de manera despectiva “generación de cristal”. Pero por otro lado, considero que suelen proponer maneras bastante creativas de hacerle frente a los retos que vivimos todos y todas las generaciones como sociedad. A mi manera de ver las cosas, son la generación de la resiliencia. Podemos aprender mucho de ellos si dialogamos y les escuchamos.
- ¿Cuáles son los principales retos que enfrentamos ante esta Generación Z?
Como cada generación, también tienen retos y dificultades. Son la generación que más acceso a servicios de salud mental han requerido. Han aprendido a alzar la voz, pero considero que siguen enfrentándose al reto de buscar alternativas a la llamada «cultura de la cancelación». Son una generación que pasa mucho tiempo en redes sociales, lo que puede generar un desequilibrio entre las conexiones virtuales y conexiones humanas reales. Nuestro reto es establecer formas de dialogar con ellos sobre estas temáticas, llegar a acuerdos en conjunto.
- Algo más que desee agregar
Recordar a los lectores que cada generación tiene sus características, sus retos y sus desafíos. Aún así, estas categorías no son suficientes para retratar la variedad en la que las personas podemos ser, podemos actuar o podemos sentir. Nos podemos llevar una sorpresa al conversar entre generaciones, tal vez podamos encontrar bastantes puntos en común. Más de lo que nos imaginamos.
Para saber…
Un estudio en EU reveló que 22 por ciento de los muchachos entre 14 y 18 años sufren depresión cuando están en la escuela y 27 por ciento cuando no asisten a la escuela.
Entre 2005 y 2017 el índice de depresión entre los adolescentes creció en 52 por ciento. Y 73 por ciento en jóvenes adultos…El índice más alto de crecimiento en los intentos de suicidio fue entre adolescentes mujeres, que se triplicó entre niñas de 10 y 14 años. (Publicado en Aciprensa]