Ana María Ibarra
Una espléndida experiencia auditiva y un encuentro con lo sagrado vivieron los asistentes al concierto Surrexit Christus Aleluia del Coro Diocesano Laudamus realizado el pasado sábado 6 de abril en la parroquia San Felipe de Jesús.
Como maestro de ceremonias fungió el padre Víctor Ortega, encargado diocesano de la dimensión de música litúrgica, y quien antes de cada participación del coro, leyó una breve reseña del autor y una reflexión de cada melodía.
Encuentro con Dios
Para iniciar el recital el sacerdote presentó la interpretación de dos antífonas marianas hechas melodía: Ave Regina Caelorum y Regina Caeli.
“Con el canto del Ave Regina Caelorum saludamos a la más bella de todas las doncellas quien con su sí dio paso a nuestra Luz que viene a iluminarnos en medio de nuestras tinieblas. Con el Regina Caeli la Iglesia saluda a la Virgen durante el tiempo alegre de la Pascua y le dice: Aleluya, el Señor ha resucitado como él lo dijo”, expresó el padre Víctor.
Anima Christi, Adoramus Te Christe y Ave verum Corpus, fueron las siguientes melodías que el coro diocesano interpretó haciendo gala bellos arreglos melódicos combinando así sus voces.
Sopranos, altos, tenores y bajos, dieron a cada interpretación una dimensión que elevó las almas de los asistentes a un bello encuentro con Dios.
Cabe mencionar que entre los asistentes se encontraba monseñor J. Guadalupe Torres Campos, obispo diocesano; y el padre Patricio Pelayo, párroco de la parroquia San Felipe de Jesús.
Apoyo a Música Sacra
Después de un intermedio, se reanudó la participación del coro diocesano.
Iniciando el segundo bloque con la melodiosa voz de la maestra Pamela Rodríguez, directora del coro, y acompañada en el piano por el maestro Rubén Quintana, quien acompañó todo el recital.
¿Qué te daré?, Ubi cáritas y Bone Pastor, fueron las melodías que los cantores interpretaron con devoción.
Para concluir, el padre Víctor invitó a los asistentes a entonar el último canto, siendo este la oración más bella del creyente: El Padre Nuestro.
“Qué belleza y hermosura del canto litúrgico. Qué bellas voces. Nos han transportado en plena Pascua al resucitado. Los felicito. Son impresionantes. Los valoro, los aprecio, estamos apoyando e impulsando la música sagrada. Agradezco al público por apoyar a nuestro coro”, expresó monseñor Torres al concluir el recital.
Por su parte, el padre Víctor agradeció al obispo y al padre Patricio por su disponibilidad.
“Tenemos una inquietud. Queremos que nuestra comunidad diocesana conozca el legado de la música sacra”, concluyó.