“Entre Belén y el Pecado”, fue el título de la pastorela que presentaron este año los estudiantes del Seminario Conciliar de Ciudad Juárez el pasado jueves 17 de diciembre en el auditorio Manuel Talamás Camandari.
En esa ocasión la comunidad del Seminario Conciliar también celebró el décimo aniversario sacerdotal del padre Jaime Melchor, quien es prefecto de disciplina Seminario Menor y bibliotecario.
Previo a la presentación de la pastorela se celebró una misa de aniversario en la capilla central del Seminario, donde el padre Jaime estuvo acompañado por el obispo don J. Guadalupe Torres Campos y sus hermanos sacerdotes formadores.
“Has recibido un espíritu de fortaleza, un espíritu de caridad, has recibido un espíritu de amor; tienes que estar animado por la caridad de Cristo pues es la caridad de Cristo la que especifica la labor de un sacerdote”, dijo el padre Benjamín Cadena en la homilía.
Al concluir la misa los sacerdotes y la comunidad asistente pasaron al auditorio para disfrutar la pastorela 2015 que este año se realizó bajo la dirección del seminarista Giovani Montantes.
En tono de comedia, la pastorela presentó el anuncio de parte del Ángel sobre el nacimiento del Niño Dios y las peripecias que vivió para ir al encuentro del Salvador.
No faltó la presencia del diablo y sus secuaces, que riñeron con el angel mediante cantos, donde se hizo patente que el bien siempre vence al mal.
Al final de la historia y tras varias rondas de carcajadas de los presentes, los pastores llegaron a adorar al niño Dios.
Mantienen tradición
Fueron un total de 25 seminaristas y jóvenes quienes participaron en esta puesta en escena con la que buscaron dejar la esperanza de que Dios nunca abandona a sus hijos y siempre se hace presente, aún en los momentos más difíciles.
Los seminaristas ensayaron alrededor de dos meses para ofrecer al público un espectáculo que ya se ha hecho tradicional y la comunidad siempre espera.
Presente en la puesta en escena, el obispo don José Guadalupe Torres Campos rió con las ocurrencias de los personajes y al final agradeció el esfuerzo de los seminaristas, sus horas de ensayo y dedicación, gracias a lo cual, dijo, cada año las familias juarenses pueden disfrutar una pastorela tradicional.
Al finalizar la pastorela, la comunidad del Seminario y los asistentes disfrutaron un un ameno convivio en el que compartieron tamales y calientitos.
Numeralia Pastorela
14 Seminaristas
05 jóvenes de parroquias
02 meses de ensayo
25 personas en staff