La comunidad del Seminario Conciliar realizó el tradicional rezo del Viacrucis, esta vez con familiares, bienhechores y amigos…
Claudia Iveth Robles
Como cada año, formadores y seminaristas del Seminario Conciliar de Ciudad Juárez invitaron a la comunidad católica juarense a meditar el Viacrucis, en una jornada que se vivió el pasado viernes 31 de marzo, a la que acudieron familiares, amigos y bienhechores de la Casa de Formación.
El padre Jaime Melchor, director espiritual de Filosofía organizó esta jornada de oración y meditación, a unos días del inicio de la Semana Santa. Fue apoyado por un equipo de seminaristas, quienes se encargaron este año de leer las meditaciones de las 14 estaciones, en cada una de las cuales se hizo una reflexión en torno al ministerio sacerdotal.
Esto, en medio de un ambiente propicio, con la capilla alumbrada a media luz y con proyecciones de cada una de las estaciones hacia el frente del recinto, mientras tres seminaristas cargaron las cruces altas e iban avanzando conforme se rezaba cada una de las meditaciones.
Cada uno de los sacerdotes que forman parte del equipo formador presentó dos meditaciones generales, en las cuales se refirieron al ministerio sacerdotal.
“Meditamos la Pasión de Cristo, pero con un tinte sacerdotal, de entrega, de sacrificio, de la cruz que conlleva este servicio, y lo que significa para nosotros sacerdotes, y para los seminaristas, que serán sacerdotes en el futuro”, dijo el padre Jaime Melchor.
“También meditamos sobre María en nuestra vida sacerdotal, y sobre lo que significa para nosotros cargar la cruz de Cristo, es decir, morir a nosotros mismos, para entregarnos en el servicio de la Iglesia”, agregó.
El sacerdote dijo que este viacrucis les ayudó a meditar en su propia vocación y dijo que para muchos seminaristas fue algo nuevo, ya que no habían experimentado una meditación de esta naturaleza.
“La experiencia es nueva, meditar cada una de las estaciones te hace reflexionar acerca de lo que significa la Pasión de Cristo y te hace concientizarte y entender más lo que se vive”, dijo el seminarista Jorge Eduardo Martín.
El padre Jaime aclaró que anteriormente invitaban a diversos movimientos de la diócesis a participar en las meditaciones, pero este año, por cuestión de agenda, el evento se organizó internamente, aunque con invitación a la comunidad en general.