Claudia Iveth Robles
El pasado sábado primero de abril se presentó la conferencia “El Deseo de un hijo”, impartida por el padre Juan Carlos López, licenciado en teología moral con especialidad en bioética.
La conferencia se llevó a cabo en el auditorio Manuel Talamas Camandari del Seminario Conciliar de Ciudad Juárez.
El sacerdote expuso el tema basado en su tesis sobre bioética.
“Una aplicación en la vida humana tiene que reconocer que tiene límites y eso es la dignidad de la persona…la medicina esta para favorecer al ser humano y no para utilizar al ser humano, es lo que intentaba explicar Pio XII en sus primeros discursos e intervenciones con especialistas médicos”, dijo el sacerdote.
Explicó que el deseo de un hijo surge de una pregunta en específico. ¿Qué pasa con el deseo de los papás por tener un hijo y no lo ven cumplido? ¿Qué implicaría decir que existe este derecho?
Situaciones inéditas
Señaló que gracias a las conquistas biotecnológicas, la maternidad se está dotando de situaciones jurídicas absolutamente inéditas y controvertidas, debido a que la maternidad está siendo reducida a simple capacidad reproductiva, perdiendo así el verdadero sentido de la maternidad.
Expresó que la maternidad implica muchos aspectos, como el sacrificio, la entrega, generosidad y ahora se piensa que existe el “derecho a ser mamá o a ser papá”.
“Si yo, hombre, sólo tengo derecho a tener un hijo genético, alguien tiene obligación de dármelo, y quien tiene la obligación, es la medicina”, dijo el sacerdote para explicar los argumentos que se utilizan en este caso.
En ese sentido habló de cuál es el sentido de la procreación, y lanzó preguntas como ¿Qué significa procrear? ¿Para qué procreamos? ¿Por qué tener hijo? ¿Qué significa tener hijos? y ¿Para qué tenemos hijos?
“Nos vamos a dar cuenta que ese deseo noble, que inicialmente experimentan las parejas que tienen dificultad para procrear, se ve transformado por la frustración del hijo que no llega; Y ese deseo y se vuelve más en un deseo de que ¡ahora tengo un hijo porque lo tengo!”, expuso.
Asumir esterilidad
El sacerdote afirmó que el deseo de un hijo es legítimo y sobre ese tema la Iglesia ha hablado mucho, a diferencia de los temas de anticoncepción y la esterilidad, en los que ha hablado muy poco.
Para concluir su ponencia, el sacerdote dijo que hay que ayudar a la pareja a asumir y aceptar la esterilidad como una condición concreta de su experiencia conyugal.
“Un filósofo dijo que el sufrimiento surge de la incapacidad de aceptar las contingencias de nuestra vida… sufro porque no acepto una realidad concreta que me toca vivir porque no lo sé”, dijo.
Finalmente, el sacerdote invitó a las parejas a dialogar sobre el tema, a no tener el falso pudor de no tocar el tema, por no hacer sentir mal al esposo (a).
“La solución es el diálogo y dejarse acompañar en lo humano y espiritual”, concluyó.