Claudia Iveth Robles
Integrantes del grupo de oración Camino al Cielo vivieron un retiro espiritual y una misa, en los que recordaron con mucho cariño a su fundadora, Malena Calleros, a 12 años de su muerte.
La misa y retiro se realizaron el pasado sábado 25 de febrero en la parroquia Verbo Encarnado, ubicado en la Colonia Constitución.
En la misa de acción de gracias, los asistentes agradecieron la labor incansable que Malenita realizó en vida atendiendo a los enfermos y orando por ellos.
“Recordamos el gran legado que nos dejó en el servicio a los enfermos y cómo ella, desde su enfermedad, buscó hacer la voluntad de Dios y llevó a cabo su misión de mover muchos corazones”, dijo el padre Rafael Saldívar, asesor del grupo.
El sacerdote invitó a los integrantes, así como a los enfermos, a insisitir en la oración a ejemplo de Malenita, quien por medio de ésta descubrió su misión en la vida como persona con discapacidad.
Como se sabe, Malenita fue tetrapléjica y vivió postrada en una silla de ruedas, pero se decidió a hacer cadena de oración por los enfermos, a quienes llamaba por teléfono y escribía cartas.
“Con personas y acontecimientos, Dios le fue indicando el camino para ir a evangelizar a otros enfermos”, dijo el sacerdote en la misa, al final de la cual invitó a los fieles de la diócesis a unirse a este grupo para servir al enfermo como voluntarios de Camino al Cielo.
Retiro
El retiro para integrantes de Camino al Cielo inició a las 9 de la mañana con alabanza y meditación y fue el padre Rafael Saldívar quien presentó una reseña histórica del inicio del grupo.
Aseguró que Dios ha hecho crecer a este grupo, ya que actualmente Camino al Cielo tiene servicio en la parroquia San Pablo, en El Paso, Texas.
Daniel Martínez impartió otro de los temas “Los valores para fortalecer al equipo”, en el que presentó consejos para dar un mejor servicio al enfermo, entre ellos “sonreír”, “abrazar”, y “escuchar” para generar Consuelo y tranquilidad a los enfermos.