Ana María Ibarra
Continuando con el gozo y la celebración de la Resurrección de Cristo, la comunidad de Santa Rosa de Lima se unió en un encuentro como comunidad, pero también con Jesús Eucaristía.
Este evento, realizado el pasado 15 de abril, tuvo momentos de alabanza, de adoración y predicación a cargo de Jonathan Reyes, del equipo juvenil de Congresos Juveniles de la Renovación Católica Carismática.
El Encuentro de Resurrección, nombre que se le dio al evento, tuvo como sede el atrio de la capilla San Antonio de Padua.
Unidos como testigos
Como primer momento, los coros de la parroquia se unieron para ambientar y animar a los asistentes a gozarse en el Señor con alabanzas y danza, siendo algunos jóvenes quienes apoyaron la actividad.
Por espacio de una hora y con un clima favorable, jóvenes y adultos alabaron al Señor con la alegría de la Pascua de la Resurrección.
“La finalidad de este evento es unificar e integrarnos como parroquia y capillas, pero también tener un encuentro entre jóvenes y adultos para testificar a un Jesús vivo, que resucitó”, compartió Sergio Soto del movimiento de Renovación en la parroquia y uno de los organizadores.
“Queremos continuar con la fiesta de la Pascua, unidos, anunciando la Resurrección de nuestro Señor Jesucristo”, agregó Tobías de la O, otro de los organizadores.
Alabanza y predicación
Después de testificar con su canto y su danza que Jesús está vivo, los asistentes experimentaron un encuentro con Él, presente en la Eucaristía.
Para este momento, el ministerio de música Israel, del Movimiento de la Renovación Diocesana, tomaron micrófonos e instrumentos para adentrar a la comunidad en un ambiente de recogimiento y adoración a través de la alabanza, acompañando de esta manera la predicación de Jonathan Reyes.
Invitando a la comunidad a saberse y sentirse como hijos e hijas amados de Dios, el predicador los llevó a entrar en intimidad con Dios cerrando sus ojos.
“Cuando cerramos nuestros ojos y disponemos nuestro corazón entramos en intimidad con Dios que nos ha hecho libres”.
Jonathan recordó a los presentes aquel pasaje en el que Jesús subió al monte y llamó a los que Él quiso para que estuvieran con Él.
“Hoy, el Dios de amor quiere estar contigo. Dile al Señor: aquí estoy Señor, aquí estamos reunidos para alabarte y estar delante de tu presencia. Quiero sentir tu amor y conocerte”, expresó el predicador.
Reconociendo la grandeza de Dios y envueltos en ese amor, adoraron y alabaron al Señor presente en la Eucaristía.
Al finalizar, con el regocijo del encuentro, los asistentes participaron en una fraternal convivencia.