“Caminar Contigo” es el programa de atención y servicio a migrantes que se opera en la diócesis a cargo de la Compañía de Jesús…
Diana Adriano
Desde el pasado mes de agosto, llegó a la diócesis el programa “Caminar Contigo”, una iniciativa por parte del Servicio Jesuita a Migrantes, JRS Servicio Jesuita a Refugiados y Servicio Jesuita a Refugiados en El Paso, que pretende dar atención y ofrecer distintos servicios a la comunidad migrante en la frontera.
El padre Conrado Zepeda, SJ, coordinador nacional del Servicio Jesuita Refugiados, dio a conocer que el equipo está muy entusiasmado por realizar este proyecto en conjunto, para poder ayudar en los procesos de cuidado, protección y vulnerabilidad tanto de migrantes, como refugiados en toda la región.
“Nosotros queremos estar a aquellos lugares donde la gente no quiere ir, incluso la gente de Iglesia, tratamos de llegar a donde están las personas con mayor vulnerabilidad. Hay trabajo que necesitamos hacer poder llegar, por lo menos a diez mil migrantes que no están en ningún albergue”, compartió el sacerdote.
Presencia en la frontera
En entrevista con Presencia, durante su visita a esta frontera, el padre Conrado explicó que decidieron hacerse una presencia en esta diócesis, ya que a diferencia de otras fronteras, esta se encuentra muy desatendida en el sentido migratorio.
“Había tenido mucha atención el asunto de la migración en la frontera sur. Sin embargo, nos dimos cuenta que la segunda frontera con mayor flujo migratorio es Ciudad Juárez.”, dijo.
“Hemos visto que mucha gente de iglesias ofrecieron espacios para acoger a los migrantes, pero hacía falta hacerlos más profesionales, constituirse legalmente para poder conseguir recursos y seguir en sus proyectos de trabajo. Vimos mucha necesidad de gente que estaba en la calle, entonces decidimos enfocar todo nuestro trabajo hacia este cuidado”, añadió.
Bien recibidos
Desde su llegada e inicio del proyecto, compartió que han sido bien recibidos por toda la comunidad católica y no católica.
“Hay organizaciones que nada más se enfocan en lo humanitario, en lo político o en la restitución de derechos y nosotros no. Nosotros tenemos esta amplitud, y podemos integrar y ayudar a organizaciones en este tema, incluyendo a iglesias cristianas, no católicas”, expresó.
Y compartió el trabajo cercano que han tenido con una comunidad cristiana, no católica que pidió apoyo con talleres sobre migración.
“También los apoyamos con trámites, en dado caso de que ellos no sepan cómo hacerlos, tenemos la asesoría legal para dar un contexto más amplio y decirles cómo son las formas, acompañar a los nuevos albergues para poder ofrecer un trabajo cada vez más profesional”, agregó el padre Conrado.
Grandes preocupaciones
Motivados por todos los retos que ven en la atención a migrantes, el sacerdote dijo que están también al pendiente del cuidado de estas personas en lo que se refiere a situaciones de violencia y comisión de delitos.
“Como programa debemos pensar una manera inteligente desde el Espíritu, desde el Evangelio, para saber cómo proteger a todos nuestros hermanos que se encuentran en una situación de vulnerabilidad y no caigan en las manos de estos grupos delictivos ”, añadió.
Todo un proceso
Para el sacerdote, la ayuda de Dios les ha permitido caminar con éxito en su misión con los migrantes.
“Ojalá podamos ir encontrando las formas cada vez mejores y más inteligentes, llenas del Evangelio para poder atender a uno de los grupos de crucificados actuales”, señaló.