Más Calaveras de la Calaca que llegó a Ciudad Juárez para llevarse al Papa Francisco…pero ¡Sorpresa! ¡no pudo con él! …
P. Leonardo García (Misa)
Padre Leonardo García
que con diferente asunto
tambien estuvo en El Punto
coordinando la Eucaristía
Dijo la muerte con hiel
¡Ay! García, ¡Qué locura!;
Por qué habiendo tanto cura
tiene que celebrar él.
Tengo un poder de locura
y si acepta ser virrey
me llevo a todos los curas,
tú te quedas con la grey.
P. Víctor Fernández (finanzas)
La crisis no se amilana
y no es tiempo de derroches,
yo te consigo una lana,
pero quiero que te moches.
Tu cuero está asegurado
y no hay piedra en tu camino,
tú jamás seras tocado,
me interesa el argentino.
P. Juan Manuel Orona (Comida Seminario y descanso del papa)
Otro güerito pelón
que parece la gran cosa,
aunque no entre en mi misión,
quisiera echarlo a la fosa.
Este cura había servido
la vianda condimentada
y le cayó tan pesada
que hasta se quedó dormido.
El caso es que mi presunto
resultó muy arbitrario,
yo esperándolo en El Punto
y él dormido en el Seminario.
P. Rodolfo Murillo (Encuentro con el Mundo del Trabajo)
En este magno recinto
me sentía en mi puro mole
dos universos distintos,
dispuestos para el atole…
Producción y emolumentos
congregados frente a frente,
como un raro experimento
con el agua y el aceite.
Francisco seguía en su trono,
la multitud deslumbrada,
la presión subía de tono
y yo seguía relegada.
P. Alberto Meléndez (evento Cereso)
Un cura de nariz roja
me sonreía displicente,
pero sin voltear la hoja,
mi fracaso era inminente.
Heme aquí muy complaciente
al borde de la locura,
rodeada de delincuentes
y para colmo de curas.
Este tiene un no sé qué
que ya me está colmando,
si no fuera por el “ché”
ya me lo estaría llevando.
P. Sashary Baruch Torres (transporte prensa)
Este Sashary ¡Caramba!,
un humilde misionero,
frente al pulpo camionero
realizó muy bien su chamba.
Bendiciones, compañero
eres bueno, ya lo creo
el evento era primero,
ya después vendrá el bloqueo.
Hiciste muy bien tu jale
y hasta me llamaste hijita
Pero eso a mi me vale,
mi objetivo es el jesuita.
P. Julián Badillo (Servidores en la Misa)
Con obediencia precisa,
este misterioso cura
fue el jefe de los guaruras,
que custodiaban la misa.
Nadie sabe, nadie supo,
-y triste mi calavera-
pero de cualquier manera
esta bella no halló cupo.
Esta vez no pudo ser,
pero también les auguro
y téngalo por seguro,
yo no tardaré en volver.
P. Ramiro Rochín (Catequesis preparatoria)
El turno es para Ramiro
que parece de a deveras
pero , por más que lo miro,
no canta mal las rancheras.
Rochín es el del anzuelo,
y por mucho que se obseca,
sus promesitas del cielo,
son solo palabras huecas.
El fin de su proceder
es boicotear mi faena,
pero no voy a ceder,
tampoco vale la pena.
Alejandro Martínez (Boletos y acreditaciones)
Lo digo con amargura
en mi fracaso anunciado
este pobrecito cura
fue quien salió peor librado
En los créditos a curas
y sólo por mis pistolas,
por culpa de mis guaruras,
el engrudo se hizo bolas.
A fuerza de tanta prisa,
su plan resulto obsoleto,
todo mundo entraba a misa
sin áreas y sin boleto.
Tal vez me pesan los años
o el fervor me ha contagiado,
más no puedo hacerle daño
la candidez no es pecado.
FINAL
Con el corazón opreso
espero les quede claro,
Francisco resultó ileso
y la muerte chupó faros.
Hoy, reconozco, perdí,
Francisco, Francisco ingrato,
no volvás más por aquí,
porque si volvés, te mato.
