Ana María Ibarra
Con motivo del Día Internacional de Naciones Unidas en Apoyo a Sobrevivientes de Tortura, el Centro de Derechos Humanos Paso del Norte llevó a cabo diversas actividades con el objetivo de concientizar y denunciar la existencia de tortura en el Estado Mexicano.
Los eventos iniciaron el domingo 25 de junio y continuaron el 26 de junio, día de la conmemoración.
Pronunciamiento
Después de que el domingo 25 de junio, el CDHPN, en conjunto con las redes familiares realizaron una jornada contra la tortura en los patios del CERESO para difundir información sobre este delito, el lunes 26 por la mañana ofrecieron una conferencia de prensa.
En la conferencia, el CDHPN hizo un pronunciamiento para concientizar a la ciudadanía sobre la tortura como un delito y una violación a los derechos fundamentales del ser humano “que desintegra y hiere a la persona, a las familias y a la sociedad en general, generando secuelas permanentes en la víctima”, expusieron.
El padre Oscar Enríquez, director del CDHPN, dio a conocer que en febrero del 2017, el relator de ONU Juan Méndez, reiteró que en México la tortura es generalizada y sistematizada, pues todos los casos llevan un mismo patrón.
Se dio a conocer que en abril del presente año fue aprobada la Ley General para Prevenir, Investigar y Sancionar la Tortura, sin embargo, aclararon, la creación de una ley no garantiza que la práctica de la tortura sea erradicada en el país.
Desde el 2011 a la fecha, el CDHPN ha registrado 196 denuncias de tortura, lo que refleja sólo los casos que se acercan al centro para un acompañamiento, pero son muchos más los que existen y no son registrados, dijo el sacerdote.
Casos sin documentar
En la conferencia de prensa estuvo también el maestro Carlos Gutiérrez Casas, visitador de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) quien externó su preocupación por la manera sistemática en la que se lleva a cabo la tortura, especialmente en el Estado de Chihuahua.
“A partir del 2007, cuando inició la guerra contra el narcotráfico, se ‘dispararon’ las violaciones a derechos humanos en la ciudad y como CEDH estuvimos documentando casos de tortura, sin embargo no pudimos darles seguimiento porque mayoría fueron perpetrados por miembros del Ejército y la Policía Federal, por lo que correspondían a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH)”, explicó Gutiérrez Casas.
Añadió que CEDH se ha dedicado emitir recomendaciones, en su mayoría a la Fiscalía General del Estado por la violación a los derechos humanos, mayormente por casos de tortura, lo que no ha cesado, sino que cada año se repite.
“Esto tiene que cambiar tarde o temprano, no debemos estar simulando la defensa de los derechos humanos. Los medios de comunicación son aliados de la población y se necesita que se dé a conocer lo que está pasando”, expresó el maestro Gutiérrez.
Denuncian con arte urbano
Como parte de la jornada contra la tortura, por la tarde de ese mismo lunes 26 de junio se develaron dos murales elaborados por colectivos de la ciudad, mostrando con el arte urbano su postura en contra de la tortura.
Mario, uno de los artistas del Colectivo de jóvenes CASA Kolping, agradeció al Centro de Derechos Humanos Paso del Norte la invitación.
El joven artista explicó que su mural muestra el poder que tienen los políticos cuando están en el gobierno, sin embargo, expresó: “como pueblo no hay que dejarnos. Conocemos pocos casos de tortura, pero hay miles. Es tiempo de trabajar en conjunto”.
Frente Marginal es otro colectivo que participó con un mural en donde se exige “Ni una tortura Más”, “Ni una más”, “Más justicia”.
“Nos vemos obligados a aportar en la denuncia de esta práctica”, dijo Maclovio, integrante
del Frente Marginal, que recibió apoyo del colectivo Rosas Rojas, el cual pinta murales con rostros de jóvenes desaparecidas.
Para concluir este evento, el padre Oscar recordó el evangelio del domingo anterior en donde Jesús dice a sus discípulos “no tengan miedo”.
“Ese es el sentido de lo humano y lo cristiano. Valoro lo que hicieron, es una expresión de solidaridad, es una expresión critica, social muy fuerte y de valentía”, dijo el sacerdote.
La jornada concluyó con un acto cultural en donde se encontraron algunas familias de víctimas de tortura mostrando su inconformidad al no tener respuesta favorable en sus casos.