Ana María Ibarra
Con profundo amor a María Santísima y agradecimiento a las madres de familia, la comunidad de Nuestra Señora del Sagrado Corazón, en El Porvenir, presentó una ofrenda a la Madre del Cielo y obsequios para las mamás de la comunidad, por la celebración del 10 de mayo, Día de las Madres.
Bendición a mamá
El domingo 11 de mayo, cuando se celebraba el Día de las Madres en el vecino país, y solo un día después del festejo en México, la comunidad parroquial pastoreada por el padre Gary Eduardo Reyes, ofreció a las mamás de la comunidad algunos bellos detalles luego de la misa de la 1 de la tarde, en la que el sacerdote primeramente las bendijo de manera especial.
Antes de iniciar la celebración eucarística, se les entregó a las mamás una bonita postal con un número al reverso mediante el cual entrarían en una rifa de regalos al final de la misa.
El párroco encomendó a Dios a las madres de familia de la comunidad, ofreciendo la celebración por ellas, sus familias y sus necesidades.
Con una reflexión referente a la liturgia del cuarto Domingo de Pascua, Domingo del Buen Pastor, y en la alegría del Resucitado, el padre Gary dirigió su homilía y en los momentos propicios continuó pidiendo a Dios por las mamás que asistieron a misa, así como por aquellas que ya han fallecido.
Ofrenda especial
Antes de dar la bendición, el padre Gary ofrendó un ramo de flores a María Santísima a quien dijo, tiene mucho amor.
“En el mes de mayo falleció mi papá. Cuando me avisaron que estaba grave, vine y me arrodille ante la Virgen y le pedí que no lo dejara sufrir. En ese momento sentí un gran consuelo. Tengo mucho amor a nuestra patrona por ser mi primera parroquia, pero también porque me ha dado muchas bendiciones espirituales y materiales”, expresó.
Y añadió: “Le ofrezco este ramo de flores a María y le agradezco por tenerme aquí. Ella es madre de la Iglesia y refugio de pecadores, y yo soy el primer pecador. Pida por mi para que sea el pastor que necesitan”.
Detalles
Después de la ofrenda del sacerdote, se llevó a cabo la rifa de obsequios para las mamás, quienes se sintieron agradecidas y contentas.
Dado que en los siguientes días se celebraría el Día del maestro, el padre Gary tuvo a bien entregar dos obsequios a maestros de la comunidad, agradeciendo su servicio.
Al dar la bendición, el padre se encaminó a la puerta principal del templo y entregó a las madres de familia una rosa a cada una. En el exterior se les compartió una rebanada de pastel.
En ese ambiente fraterno y festivo, las mamás de la comunidad agradecieron al padre y los servidores ese gesto tan bello.