En torno a los 60 años de la erección canónica de la diócesis y en su 54 aniversario, el Seminario Conciliar de Ciudad Juárez abrió sus puertas para recibir a la comunidad diocesana en su ya tradicional kermés.
Ana María Ibarra
En torno a los 60 años de la erección de la diócesis y en su 54 aniversario del Seminario Conciliar de Ciudad Juárez, la familia de la casa de formación abrió sus puertas para recibir a la comunidad diocesana en su ya tradicional kermés.
Antojitos mexicanos, música en vivo, juegos, obras de teatro y la tan esperada lucha libre, fueron parte de los eventos que pudieron disfrutar las familias juarenses.
Misa episcopal
Como el alma mater de la diócesis, definió el obispo, don José Guadalupe Torres, al Seminario, esto durante la misa que presidió el pasado domingo 10 de septiembre en la capilla central de la casa de formación.
“Es un lugar donde se forman los futuros sacerdotes. Es importante orar por nuestro Seminario, ofrecer esta eucaristía por nuestra diócesis y nuestro seminario”, dijo el obispo al iniciar la celebración.
Después de la liturgia de la palabra, al iniciar su homilía, el obispo presentó al padre Víctor Vega, recién ordenado el 8 de septiembre y formador del Seminario, quien recibió los aplausos de los asistentes.
Monseñor Torres reflexionó en su homilía sobre la virtud de la corrección, la cual dijo es muy necesaria.
“Es importante que nos corrijamos fraternalmente. Dios que es un padre bueno, un padre de amor, nos corrige. Corrigió a los profetas, a los reyes, a todo el pueblo porque los ama y busca su bien. Cristo en todo el evangelio corrigió a sus apóstoles con caridad. El Señor nos pide que busquemos siempre el bien del otro, por eso la corrección debe ser con amor”, resaltó el obispo.
Añadió que no corregir se vuelve pecado de omisión, por lo que, cuando se corrige al hermano se gana no solo la salvación de él, sino la salvación propia.
“Qué difícil es corregir. Antes de hacerlo hay que orar, ir ante el Santísimo para que nos ilumine, para que ilumine al que va hablar y al que va a escuchar”.
“Que el Señor bendiga nuestra diócesis en estos 60 años. Que bendiga al seminario, a nuestros formadores y a toda la familia de este Seminario”, finalizó.
Celebraron con el Seminario
Familias enteras acudieron al Seminario para compartir la gran fiesta, a la que muchos de ellos acuden desde hace varios años con el fin de apoyar al Seminario, y agradecieron a Dios poder apoyar con su presencia en esta actividad.
Soy vecino del Seminario desde que nací. Me da mucho gusto que la gente de Ciudad Juárez se congregue y venga a la kermes. En estos 60 años de la diócesis es necesario que la población tenga en mente que es muy necesario tener gente que se dedique a la formación espiritual. Los jóvenes que sientan el llamado vengan al Seminario a que se realice esa inquietud.
Rafael Holguín, entrenador del equipo de basketbol del Seminario.
Tenemos 40 años viniendo a la kermes. Vengo con mis hijos, mi esposo y mis nietos. Nos da mucho gusto apoyar a los seminaristas porque les hace mucha falta. Felicito a la diócesis y a todos nosotros porque somos parte de esta comunidad y doy gracias a Dios por tantos años como diócesis, desde monseñor Talamas hasta ahora con don Guadalupe.
María Eugenia Herrera de Flores
Estoy feliz de poder servir para ayudar al Seminario. Tengo 10 años sirviendo y no me he arrepentido, hasta que me deje el Señor, aquí estaré. Estos 60 años como diócesis es fruto del esfuerzo de todos, de nuestros señores obispos que han trabajado mucho por nosotros, y nosotros que hemos tratado de corresponderles por todo el esfuerzo que han hecho para que esta comunidad siga creciendo.
Rosa María/ La Natividad del Señor
Desde chica he estado pegada en el Seminario. Estoy en un grupo y hacemos un desayuno mensual para los seminaristas. Es muy padre venir a participar de esta fiesta, es un día diferente. Siempre he estado cercana en la Iglesia y estoy agradecida con Dios por estos 60 años de la diócesis.
Cristina García
Vengo desde el 63, pero antes ya había kermes. Vine desde la primera piedra.
No me imaginaba ver una cosa tan grande como esta, y es una fiesta que es tradición. Al celebrar estos 60 años como diócesis me siento muy contento de que todavía estoy viendo estas celebraciones.
Rubén Aguilar/ La Sagrada Familia
Tengo 12 años apoyando la kermes del Seminario. Me siento muy contenta de servir al semillero de las vocaciones. Es importantísimo servir a nuestro Seminario porque tiene muchas necesidades. Tengo 72 de edad y es una maravilla celebrar los 60 años de la Iglesia en Ciudad Juárez. Me siento muy agradecida con el Señor que me permite servirlo y ruego por las vocaciones y por la evangelización.
María Luisa Porras/La Natividad del Señor