Ana María Ibarra
De manera sencilla pero emotiva, tres franciscanas seglares agradecieron a Dios por haberles llamado a esta misión y se comprometieron a ser fieles a la vocación franciscana, esto mediante una misa de acción de gracias llevada a cabo el pasado 17 de noviembre en el Santuario de San Lorenzo.Hicieron profesión perpetua Franciscanas seglares
Reflexión.
En el día de Santa Isabel de Hungría, Irma Jarquín Perzabal, hizo su iniciación a la segunda etapa de formación franciscana, mientras que Noemí Ríos Domínguez y Clara Ramírez, hicieron su profesión definitiva como franciscanas seglares.
Con una reflexión sobre la liturgia dominical de ese día, el padre Alfredo Abdo Rohana, rector del santuario, dirigió su homilía a los fieles y a la familia franciscana seglar, resaltando la invitación de Jesús a “hacer nuestros los valores del evangelio”.
“Los valores se han venido abajo, el sentido de familia se está perdiendo, así como los valores morales y espirituales, y el respeto a la vida. Cristo nos invita a hacer nuestros los valores del evangelio”, dijo el padre Abdo.
Inicia nueva etapa de formación
Después de la homilía, Irma Jarquín pidió ante el padre Abdo y ante la ministro Ruth Larios Fonseca, ser aceptada para iniciar la segunda etapa de su formación en la Orden Santa Clara de Asis, asentada en el Santuario de San Lorenzo.
Ruth impuso el escapulario a Irma, que simboliza las cinco llagas de Jesús, así como el cíngulo, signo de pobreza, mismo al que se le hicieron tres nudos: fe, esperanza y caridad, y a su vez significan castidad, pobreza y obediencia.
A Irma se le entregó la Biblia y las reglas de la orden.
Hacen profesión perpetua
Por otra parte, Noemí y Clara pidieron su recepción perpetua, siendo recibidas por la fraternidad.
El padre Abdo las cuestionó sobre su deseo de abrazar la orden, dando testimonio, siendo fieles a su vocación y al espíritu de servicio.
Noemí y Clara hicieron su profesión definitiva como franciscanas seglares, momento en el que se comprometieron a ser fieles a la vocación franciscana a la que han sido llamadas.
Ante el rector del santuario y la ministro, las seglares prometieron seguir las reglas y constituciones de la orden.
Con alegría y agradecimiento hacia Dios por el privilegio de seguir las seguir las huellas de San Francisco, las tres seglares concluyeron el rito y continuaron con la eucaristía.
El padre Abdo pidió un aplauso de parte de los fieles, resonando por el templo los aplausos de los asistentes, especialmente de las familias de las tres franciscanas seglares.
