Con una invitación a soñar y seguir luchando por el matrimonio y la familia, los nuevos coordinadores nacionales de Encuentro Matrimonial Mundial en México hablaron a Presencia sobre sus retos y el Año de la familia…
Ana María Ibarra
Con grandes retos en un país donde los antivalores se promulgan, y de esta manera la familia y el matrimonio van a menos, Encuentro Matrimonial Mundial cuenta con nuevo Equipo Eclesial Nacional, formado por el matrimonio de Leticia y Salvador Hernández y el sacerdote Reynaldo Aguilar de la Arquidiócesis de Guadalajara.
Radicados en la Ciudad de México, Leticia y Salvador tienen 37 años de casados, dos hijos adultos y 21 de haberse integrado en el movimiento.
Mientras que el padre Reynaldo tiene 20 años de haber sido ordenado sacerdote y 10 año de haber ingresado a Encuentro Matrimonial Mundial, en la capital de Jalisco.
A continuación, la entrevista que concedieron a Presencia
¿Cómo asumen este nuevo encargo que acaban de recibir?
Salvador: Fue un suceso muy sorpresivo para nosotros, después llegó temor y hasta la piel se puso chinita de pensar en qué íbamos a hacer. Los principales sentimientos fueron de sorpresa y temor, diría de mucho temor. Es un fuerte llamado a servir.
Lety: Estamos convencidos que es un llamado de Dios nuestro Señor a dar lo que tenemos para servicio de nuestro México en este momento. Lo asumimos con mucho amor, con mucho compromiso y con mucha fidelidad a Dios y a nuestro movimiento.
Padre Reynaldo: Una vez que hemos asimilado esto como un llamado y no tanto como un cargo, lo experimentamos ahora como un agradecimiento. Es algo que Dios nos está pidiendo, nuestro movimiento nos está pidiendo y estamos agradecidos y muy dispuestos a poder servir.
¿Qué es lo que más les gusta del movimiento que ahora encabezan en México? ¿Por qué las parejas deberían conocerlo?
Salvador: Son muchas cosas las que nos motivan y las llevamos como un mensaje muy especial que Dios nos da a través de poder participar en este movimiento. Encuentro Matrimonial enseña un método de comunicación a través de sentimientos y de profundizar en las necesidades que como humanos tenemos. Sabemos y estamos muy convencidos que los grandes problemas de la humanidad se dan en la comunicación, y obviamente se refleja en la relación de las personas, de los novios, de los esposos, de las familias. La comunicación puede ser o una gran posibilidad de acercamiento, o una gran barrera que nos puede distanciar. En el encuentro tenemos la posibilidad de tener una comunicación superficial, pero también tener una comunicación profunda que toque el interior de cada uno.
Lety: El gusto puede ser algo momentáneo, placentero, y realmente en los años que tenemos en nuestro hermoso y querido movimiento nos ha dado muchas herramientas para vivir la unidad, el amor, para valorarnos y tener una comunicación mucho más profunda como esposos y con nuestros hijos. Esas son las herramientas que Encuentro Matrimonial nos regala y enaltece mucho el valor de la familia.
¿Cuáles consideran que son los tres principales retos que enfrenta el matrimonio hoy, y en ese contexto, su movimiento?
Lety: Son muchos. Pero serían el compromiso, la fidelidad y la responsabilidad que tenemos como matrimonio, algo en lo que se puede ahondar todavía mucho más.
Salvador: No es fácil vivir como esposos. En el noviazgo muchas veces no nos dejamos conocer tal y como somos, más bien es un enamoramiento. Casados nos enfrentamos a una persona que no conocemos, con costumbres, con retos, con sueños que pueden ser incluso hasta diferentes, y esa falta de conocimiento a veces nos lleva a dudar si esta decisión de compartir la vida con el otro es la adecuada, empezamos a tener problemas para vivir juntos. Otro reto tiene qué ver con la amenaza al matrimonio. Se fomenta el divorcio, este famoso divorcio, el aborto, la cultura de la muerte, que atenta contra ese gran regalo que Dios nos da que es procrear.
Padre Reynaldo: El ambiente que se está dando en la sociedad no es favorable para el matrimonio ni para los sacerdotes. Vivimos en un ambiente donde se favorece más el egoísmo, el individualismo, el relativismo y nos lleva a vivir en el plan del mundo, de las ideologías, en contra del matrimonio y no en el plan de Dios. Ese ambiente que nos va a alejando de Dios no es favorable y es un grande reto que tenemos para hacer frente, viviendo en una manera plena nuestra vocación, como sacerdote en la comunidad, y los matrimonios en su relación como esposos y como padres de familia.
El Censo de Población 2020 revela que cada vez son menos las personas que quieren contraer matrimonio y más los que se divorcian… ¿A qué atribuyen esto y qué implicaciones sociales tiene?
Padre Reynaldo: Estamos viviendo una situación muy complicada que se agrava todavía más con respecto a la situación de la pandemia. Hay todo un planteamiento cultural y social con intereses económicos que fomentan todo lo que mencionamos anteriormente. Es lamentable que las estadísticas reflejen estos números tan negativos con respecto al matrimonio y a la familia, estamos inmersos en una sociedad donde se difunden los antivalores que afectan a los matrimonios, y por el contrario se fomenta a tener relaciones de interés, de conveniencia, de abuso, todo esto es un desafío en Encuentro Matrimonial Mundial y estamos dispuestos a enfrentarlo. Hay iniciativas que proponen modificar nuestra Constitución Política de México y que afectan directamente al matrimonio y a la familia. Nuestros obispos nos han mandado un mensaje muy valioso que lleva por título “Unidos en el Bien Común”, y nos invitan a estar unidos en contra de todos estos proyectos que afectan y afectarán directamente al bien de la familia.
¿Cómo debe enfrentar la Iglesia esta realidad y cómo le ayuda EMM?
Padre Reynaldo: Hay que tener muy claro que la familia no es una institución formada por la Ley, no es una legislación, sino es una institución querida y creada por Dios. El Papa Francisco nos ha dado muchas guías para que nosotros trabajemos en favor de la familia. La Iglesia no debe claudicar en la proclamación de los valores del evangelio, entre ellos el matrimonio y la familia que son una institución creada por Dios. También es muy importante que no dejemos de mostrar que el matrimonio y la familia es un verdadero camino de santidad, un verdadero camino de perfección. En el Encuentro Matrimonial Mundial queremos colaborar con esta misión, de hecho, la misión del movimiento es proclamar el valor del sacramento del matrimonio y del orden sagrado en la Iglesia y en el mundo. Estamos convencidos que cuando hay matrimonios y familias que viven plenamente su misión familiar y sacerdotes verdaderamente entregados al servicio de la Iglesia con amor y generosidad, se puede cambiar el mundo.
Por disposición del Papa comenzaremos el Año de la Familia por el quinto aniversario de la Amoris Laetitia. ¿En qué forma esto ayuda al matrimonio, a su movimiento?
Salvador: Estamos muy convencidos que nuestro Papa, Francisco, en todo momento está dando líneas de acción. Amoris Laetitia, La Alegría del Amor, es una guía de acción que nos ayuda a tener elementos para luchar en favor del matrimonio y la familia. Esta iniciativa que el papa nos ha mandado en este aniversario, trabajar en Amores Laetitia, hacer vida lo que en ese documento propone nos llena de mucha motivación.
Lety: Este documento influye a toda la pastoral familiar, hay una dimensión de familia a la que pertenecemos como Encuentro Matrimonial y en este momento nos ha creado una iniciativa para fomentar que se conozca y se aplique La Alegría del Amor, es básico resaltar y reconstruir lo que es vivir en la alegría del amor que nos ofrece Dios nuestro Señor.
Padre Reynaldo: El papa, a través de este documento, nos da muchas pautas. Encuentro Matrimonial quiere aprovechar toda esta riqueza al servicio de las familias, de los matrimonios de nuestro movimiento en nuestros talleres de comunidad, asambleas, de tal forma que vayamos iluminando el caminar de nuestras familias a través de este documento. El papa nos invita a no renunciar, a seguir proponiendo el matrimonio con el fin de contradecir la sensibilidad actual, de no estar a la moda, sino que sigamos trabajando y proclamando lo maravilloso que es el matrimonio, aunque no sea lo que la sociedad quiere oír.
¿Cuál es su mensaje a los matrimonios de Ciudad Juárez, tanto los que pertenecen a EMM, como en general?
Salvador: Hacemos un llamado con mucha motivación y mucha esperanza a todos los sacerdotes, los matrimonios y a las familias del Encuentro Matrimonial para estar unidos en estos momentos de transición en el liderazgo. Es un momento de renovación en todo el país. Les pedimos lo vivamos unidos en oración, en la disposición de aceptar este cambio, y estar dispuestos al llamado de servir a Jesús de las formas en que él está convocándonos.
Lety: Dios nuestro Señor nos ha dado un regalo muy grande como fuente de evangelización para bien de nuestra Iglesia y no debemos dejarlo escondido. Es momento de que, quienes ya estamos en el Encuentro Matrimonial, seamos testigos de lo que ha hecho Dios en nosotros y así contagiar a muchos más matrimonios de Ciudad Juárez a que participen en nuestro movimiento. Es una fuente inagotable de regalos, sorpresas y herramientas, para poder determinar que el matrimonio es posible para toda la vida. Para los que no conocen, la invitación es a que se unan a esa corresponsabilidad para dejar una semilla sembrada en este mundo y crear un mundo mejor para todos.
Padre Reynaldo: A todas las familias y matrimonios, es importante que en estos momentos tan desafiantes que estamos viviendo, estén dispuestos a trabajar por su matrimonio. Los invitamos a luchar, a rescatar su amor, y superar todos los embates que nos encontramos y que nos amenazan.
Algo más que deseen agregar
Lety: Resaltar que la exhortación La Alegría del Amor no es caduca, al contrario, es constante en el día a día y al descubrir el Amor, que trae muchas connotaciones, vamos a valorar muchas cosas.
Padre Reynaldo: Una canción muy significativa en el Encuentro de Matrimonios dice: con fe, lo imposible soñar. El papa dice: el papa tiene un sueño para la Iglesia, Dios tiene un sueño para la humanidad. Nosotros queremos seguir soñando e invitar a todos los matrimonios de Encuentro Matrimonial a soñar y seguir luchando por reconstruir nuestras familias, no sólo poe un movimiento más fuerte, sino por familias que sean más fuertes, unidas en estos momentos difíciles, unidos al papa Francisco.
Salvador: Esta pandemia ha dejado muy claros los problemas de salud que enfrentamos, problemas económicos, pero los más importantes son los problemas de afectividad, de amor. Lo dice el Papa Francisco: que de esta pandemia salgamos más fortalecidos, no para volver al pasado, hay muchas cosas que nos estaban deshumanizando, sino con el corazón dispuesto a amar a los demás. Nuestro sueño posible es que nos amemos unos a los otros después de esta pandemia. A Ciudad Juárez un abrazo muy fuerte, a toda la Iglesia, lo decimos especialmente a Encuentro Matrimonial, pero a todos en general, y vamos a atrevernos a soñar en un mundo nuevo.