Ana María Ibarra
En un ambiente de sentimientos encontrados, más con el corazón lleno de agradecimiento, la comunidad parroquial de Cristo Rey celebró el pasado 28 de junio el XVI aniversario sacerdotal de quien ha sido su párroco por 14 años, el sacerdote Leonardo García Aviña.
Esta celebración sirvió también como despedida, pues el próximo 8 de julio el padre Leonardo tomará posesión como párroco de la comunidad San Martín Obispo.
En la solemnidad de San Pedro y San Pablo, el padre Leonardo presidió la Eucaristía para celebrar con la comunidad de Cristo Rey su aniversario sacerdotal número 16 a celebrarse un día después, el 29 de junio.
“Celebremos que el Señor ha sido misericordioso con nosotros” expresó el sacerdote al inicio de la celebración.
En su homilía, el padre Leonardo mencionó que muchos llamados por el Señor han sabido responder desde su propia fragilidad, cuando hay equivocaciones o desde las alegrías que llenan de gozo el corazón.
“Señor tú lo sabes todo, tú sabes que te amo, esa experiencia de Pedro es la experiencia de muchos de nosotros que somos elegidos por el Señor para estar con Él. El evangelio nos dice que los llamó para que estuvieran con él y luego los envió anunciar el evangelio¨, citó el sacerdote.

El padre Leonardo se reconoció ese día con sentimientos encontrados. Por un lado, la alegría de su aniversario sacerdotal, por el otro, el despedirse de la que fue su primera comunidad como párroco.
“Le decía al obispo que no sabía qué difícil era la despedida, pero también con una profunda gratitud por todo lo vivido con ustedes. Me recibieron con los brazos abiertos”, recordó el sacerdote.
En sus remembranzas, mencionó los momentos alegres y difíciles compartidos con los miembros de su comunidad.
“He sentido en todo momento su cercanía. Su cariño me ha sostenido en la misión que el Señor me ha confiado”, expresó.

El padre Leo agradeció a los laicos y servidores de la parroquia y a los sacerdotes asistentes a la celebración.
“Agradezco a las hermanas Capuchinas por su oración que me sostiene, a las Misioneras Guadalupanas y los niños que rejuvenecen el espíritu, a las Hermanas Misioneras de María Dolorosas de la Ciudad del Niño”, dijo al recordar que le ha sido encomendada otra comunidad, de la cual tomará posesión en unos cuantos días.
“Me llevo todo lo que he aprendido de ustedes, esta parroquia me ha preparado para mí nueva misión. Su oración y el testimonio de su vida me sostienen”, dijo.
El padre Leonardo animó a la comunidad de Cristo Rey a seguir con fe, a cuidar la comunidad y a recibir al nuevo párroco con amor, “porque viene en el nombre del Señor”.
La comunidad de Cristo Rey agradeció al padre Leonardo con un reconocimiento y palabras de felicitación por su aniversario y de agradecimiento por su servicio.
Las muestras de cariño continuaron después de la Eucaristía con una cena y música de mariachi.

































































