Ana María Ibarra
Llenos de la esperanza del Adviento, fieles de la comunidad parroquial de La Transfiguración del Señor, recibieron a los sacerdotes Gregorio Mauricio López y Simón Fernando Macías, Misioneros de la Natividad de María, quienes guiarán de la parroquia como párroco y vicario, respectivamente.
La toma de posesión del nuevo párroco y el nombramiento del vicario se llevó a cabo el pasado lunes 19 de diciembre en una misa presidida por monseñor José Guadalupe Torres Campos, obispo de la diócesis.
Asigna responsabilidades
Al inicio de la celebración, el padre Jorge González, secretario canciller de la diócesis, leyó el decreto del nombramiento del nuevo párroco, Gregorio López, firmado por el obispo quien da autoridad y responsabilidades al sacerdote.
También se otorgó el nombramiento al sacerdote religioso Simón Macías, para realizar su función de vicario.
Antes de la lectura del Evangelio, el nuevo párroco se puso de rodillas delante del obispo, quien le entregó el libro de los Evangelios en signo de la misión de proclamar la buena nueva y con la encomienda de confortar a los fieles, en el nombre de Dios, a través de su predicación.
Colaborar en comunidad
En su homilía, don José Guadalupe resaltó que el tiempo de Adviento, tiempo de esperanza, es un tiempo que invita a los cristianos a acrecentar su fe y el amor a Dios.
“Recibir un nuevo párroco, junto con su vicario, solamente en la fe del misterio de la salvación podemos vivirlo en comunidad. Es el mismo Cristo que viene a salvarnos, a hacerse presente”, dijo.
Añadió que un sacerdote es elegido por el Señor para una misión especial: comunicar a Dios y fortalecer al pueblo a través del alimento de la Palabra y del Cuerpo y Sangre de Cristo.
“Dios fortalece al sacerdote para servir y santificar al pueblo que se le confía. Hoy debemos dar gracias a Dios por el sacerdocio en estos dos hermanos nuestros que Dios regala a esta comunidad para continuar la obra evangelizadora”, expresó.
En su mensaje, el obispo pidió a la comunidad colaborar con total disposición y entrega al trabajo pastoral que continuarán sus nuevos pastores.
“El párroco se compromete a ejercer el sacerdocio con total fidelidad para entregar amor y dirección a esta comunidad. Pero también ustedes estén abiertos al plan y gracia de Dios, es a Él a quien servimos y seguimos. Les pido en el nombre de Cristo esa disponibilidad de dejarse conducir por el Espíritu Santo”, pidió el obispo.
Una nueva historia
Antes de terminar la celebración, habiendo ya tomado posesión de la parroquia y firmado el acta, el padre Gregorio dirigió su primer mensaje como párroco.
El sacerdote se dijo agradecido con Dios por destinarlo a pastorear la comunidad de La Transfiguración del Señor.
“Es una encomienda muy difícil y de mucha responsabilidad ver y buscar la salvación de toda la comunidad parroquial, pero Dios no nos pide algo que no esté a nuestro alcance”, dijo confiado el sacerdote.
El padre Gregorio dirigió también palabras de agradecimiento al señor obispo por la confianza que puso en él, y agradeció a los sacerdotes presentes, diocesanos y religiosos, algunos de otras diócesis que vinieron acompañarlo en tan especial momento.
El sacerdote reiteró a la comunidad su disposición para trabajar juntos en lo que llamó “una nueva historia para la parroquia”.
“Comenzamos a construir una nueva historia juntos, la parroquia y los Misioneros de la Natividad de María. Estamos para servirles. Venimos con toda la disposición, venimos a entregar nuestra juventud. Ayúdenos para lograr la salvación de ustedes y de nosotros”, expresó el misionero nativita.
Al final de la celebración, sacerdotes y fieles compartieron un sencillo aperitivo.