Ana María Ibarra
Como regalo del Espíritu Santo para la Diócesis de Ciudad Juárez, el obispo diocesano don José Guadalupe Torres Campos confirió los ministerios del lectorado y acolitado a dos grupos de seminaristas el pasado domingo 15 de mayo durante la festividad de Pentecostés en el templo de Catedral.
Reavivar el Bautismo
Agradecidos con Dios por su misericordia, los 18 seminaristas ocuparon los primeros lugares del templo acompañados por sus padres, quienes participaron de la alegría de sus hijos en camino al orden sacerdotal y pidieron para ellos fortaleza en su vocación.
Tras bendeciur el agua, el obispo, acompañado por los sacerdotes Juan Manuel Orona, rector del Seminario, y Mario Manríquez, vicario de Pastoral, rociaron con agua bendita a los fieles, quienes con ese signo reavivaron la gracia de su Bautismo.
Después de la lectura del evangelio, los candidatos al lectorado y acolitado fueron llamados por su nombre y se presentaron delante del obispo para luego tomar su lugar en el presbiterio y desde ahí escuchar el mensaje del obispo.
Guiarse por el Espíritu Santo
A la luz del evangelio del día, el obispo cuestionó: ¿Qué nos pide Jesús a todos los que decidimos seguirlo?.
“Al inicio del evangelio lo dice claramente: que nos amemos todos. Es el amor el que nos debe distinguir. Es el sello del cristiano y de los discípulos de Cristo. Dios nos ama tanto que dio a su Hijo. Tanto es el amor del hijo que da su vida por nosotros. Tanto es el amor entre el Padre y el Hijo que nos envían al Espíritu Santo”, dijo el obispo en referencia a la fiesta de Pentecostés.
Reflexionó luego sobre el impulso y la guía del Espíritu Santo en cada una de las vocaciones de la diócesis, y dirigiéndose a los jóvenes seminaristas les dijo: “Dios los ama y pone su mirada en ustedes. Aquel llamado que sintieron de seguir a Jesús hoy se rectifica y les confía este ministerio Se espera de ustedes una respuesta generosa”.
Finalizó pidiendo a todos dejarse guiar por el Espíritu Santo y dijo a los seminaristas: “Queridos jóvenes, digan sí a Jesús”.
Rito de institución de ministerios
Ya en el rito de la institución de ministerios, delante del obispo, los electos al lectorado recibieron de rodillas la bendición de monseñor Torres, quien les entregó el libro de los evangelios y les confirió el ministerio al que fueron llamados con la encomienda de predicar a Cristo y glorificar al Padre celestial.
Enseguida fueron llamados los cinco seminaristas elegidos para el ministerio del acolitado, quienes de rodillas recibieron el copón con el pan que sería consagrado para convertirse en el Cuerpo de Cristo y con la bendición del obispo fueron enviados a servir con fidelidad a la Iglesia.
Los jóvenes recibieron del obispo un abrazo paternal mientras el pueblo de Dios los felicitaba con un aplauso.
Ministerio de Lectores
Alberto Jesús González
Ángel Manuel Quintana Esparza
Arturo Martínez Hernández
Daniel Alejandro Barraza
Diego Guadalupe García
Eduardo Canales
Luis Felipe Ramos López
Gary Eduardo Reyes
Jesús Figueroa Lucero
Jesús Manuel Caldera Cordero
José Farías Ruíz
José Luis Soriano Martínez
René Acosta
Ministerio del Acolitado
Gustavo Balderas Soto
José Fernando de Santiago
José Ricardo González
Víctor Manuel Ortega Ruela
Víctor Manuel Vega Ortega