Diana Adriano
El padre Francisco Javier Calvillo, director de la Casa del Migrante, recibió el pasado 08 de diciembre la presea Fray García de San Francisco, en el marco del aniversario 361 de la fundación de la ciudad.
Este premio se entrega para reconocer públicamente a las personas o asociaciones que han realizado un acto solidario en beneficio de Ciudad Juárez y sus habitantes.
Fue en la 92 Sesión Solemne de Cabildo, presidida por el alcalde Armando Cabada Alvídrez,
donde se llevó a cabo la entrega del galardón en el salón Francisco I. Madero de la presidencia municipal.
El presidente municipal felicitó y agradeció a los ganadores de la convocatoria de este año, pero especialmente la Casa del Migrante, que por más de 38 años ha permanecido firme y activa en la atención y cuidado de los migrantes que esperan poder cruzar hacia los Estados Unidos o aquellos que son deportados.
Festejo de la ciudad
En el marco de la celebración, en el recinto se transmitió un video con una representación cultural sobre la fundación de Ciudad Juárez hace 361 años y precisamente a cargo de un personaje de la Iglesia Católica, de quien la presea entregada toma su nombre: Fray García de San Francisco, fraile franciscano.
Las grabaciones para esta presentación se realizaron al exterior de la Misión de Guadalupe en el Centro Histórico, debido a las medidas de prevención por la contingencia de covid-19, y así evitar cualquier posible contagio.
En la sesión de Cabildo también se entregaron reconocimientos a la Asociación de Padres de Niños con Cáncer y Leucemia (APANICAL) que fue designada en segundo lugar de la convocatoria para la presea. Acudió a recibir el reconocimiento el doctor Jesús Ornelas Ramos.
Igualmente recibió reconocimiento de tercer lugar en la convocatoria, el proyecto CASA Promoción Juvenil, Asociación Civil, representada en el evento por José María Reyes.
Obra religiosa y diocesana
Como se sabe, la Casa del Migrante es una obra que comenzó hace más de 35 años en Ciudad Juárez a cargo de religiosos escalabrinianos cuyo carisma incluye el cuidado de los migrantes.
Pero al retirarse ellos de la diócesis, la obra quedó a cargo de sacerdotes dominicos y religiosas provenientes de Estados Unidos.
Sin embargo, luego los dominicos también debieron dejar la diócesis, así que la obra pasó a ser diocesana, es decir, con atención enteramente por parte de la diócesis.
Pero en ningún momento, el servicio fue suspendido, sino todo lo contrario, ha ido incrementando su alcance, sobre todo en estos últimos dos años, luego de la presencia del fenómeno de caravanas migrantes, programas de deportación masiva de Estados Unidos y las nuevas políticas migratorias que han atraído a cientos de miles de personas migrantes de todas partes del mundo.
Laicos la propusieron
Es importante saber que la Casa del Migrante fue postulada por cuatro laicos católicos, quienes hicieron la propuesta a las instancias correspondientes.
Rogelio González de la parroquia Jesús El Salvador; Fátima Anaya, de Método de ovulación Billings; Maribel Carreón, maestra de los colegios Ignacio Zaragoza e Independencia y Osbaldo Quintana del Movimiento Familiar Cristiano, son quienes propusieron a esta obra diocesana.
Estos miembros activos de la diócesis, se sienten orgullosos de que una institución religiosa sea la ganadora en este año, aunque ya anteriormente otras obras católicas la han obtenido.
RECUADRO
Una gran alegría y un reto mayor
“Estos reconocimientos son de gran alegría para nosotros y son motivaciones. Uno piensa que a veces los migrantes no cuentan, pero aquí es donde descubrimos que sí y que la gente está al tanto de la realidad de los migrantes”, dijo el padre Javier Calvillo, director de la Casa del Migrante, al ser entrevistado tras la recepción de la presea.
Ante la situación actual que se vive, el sacerdote resaltó que todos los que apoyan en la Casa del Migrante no pierden el ánimo, sino que siguen trabajando con alegría en esta misión que Dios les ha encomendado.
“Cuando hablamos de la Casa del Migrante, hablamos de la gente: los bienhechores, empresarios, organizaciones internacionales, voluntarios y para todos es muy bello este reconocimiento, pues es algo que te motiva para que podamos seguir en esta misión”, agregó.
Lo que implica
Igualmente reconoció que recibir un reconocimiento de la magnitud de la Presea Fray García de San Francisco es a la vez un gran reto, pues les compromete a seguir sirviendo con gran caridad a la población migrante que debe transitar por esta ciudad y padece los sinsabores de ser foráneo.
Tras agradecer el reconocimiento recibido, el padre Javier recordó que las necesidades de esta obra de la Iglesia Católica local siguen vigentes, y más ahora en esta temporada de Navidad, que ciertamente será diferente debido a la pandemia.
Y por ello pidió apoyar a este centro donando: Frutas, Verduras, Carnes frías y Huevo.
Frase…
“Cuando hablamos de la Casa del Migrante, hablamos de la gente: los bienhechores, empresarios, organizaciones internacionales, voluntarios… y para todos es muy bello este reconocimiento, pues es algo que te motiva para que podamos seguir en esta misión…
Pbro. Javier Calvillo, director de la Casa del Migrante