Diana Adriano
Luego de dos décadas de un servicio valiente y entregado, Blanca Estela Aranda se despidió como directora del Centro de Apoyo a la Mujer Juarense, y el Consejo directivo y voluntarias del centro organizaron un evento de despedida que se realizó el pasado primero de septiembre.
En el emotivo acto, amigos, colegas, familiares y beneficiarias se reunieron para honrar la dedicación incansable y compromiso de Blanca, quien se retira de su cargo para dedicar más tiempo a su familia y disfrutar de su merecido descanso después de 20 años de servicio inquebrantable en el CAMJ.
En el evento, los asistentes recordaron y agradecieron que durante su gestión, el CAMJ pudo trabajar eficazmente para brindar apoyo integral a mujeres en situaciones de vulnerabilidad, ofreciendo servicios de asesoría, refugio, capacitación y empoderamiento.
Agradecida con Dios
Con emotivas palabras, Blanca Estela Aranda compartió sus sentimientos y reflexiones después de dos décadas al servicio de la comunidad.
Entre lágrimas de emoción y sonrisas de gratitud, Blanca expresó su profundo agradecimiento por la oportunidad de servir en este «hermoso apostolado» de defender la vida y a las mujeres en Ciudad Juárez.
«Tengo 20 años trabajando en el CAMJ y ya llegó el momento de mi retiro», dijo Blanca Aranda con voz emocionada.
«Entré como voluntaria en el 2003. Me siento muy contenta, agradecida con Dios por haberse fijado en mí y haberme llamado para este hermoso apostolado».
La entrevistada destacó la importancia del trabajo del CAMJ en la defensa de la vida y de las mujeres en situación de vulnerabilidad.
«Me siento muy privilegiada de que Él me haya hecho este llamado para estar aquí porque es muy sagrado. En estos 20 años, Dios fue el que me equipó para poder lograrlo, siempre me guió con su Espíritu, porque si no hubiera sido así, no se podría. Es una lucha directa con el enemigo y solamente con su gracia podemos sostenernos», añadió.
Nuevas líderes
Tras la despedida de Blanca Aranda, la dirección del CAMJ recae en dos dedicadas líderes: Araceli López y Rocío Estrada, quienes compartieron cómo se sienten en tan importante encargo de liderar esta organización dedicada a la defensa de los derechos de las mujeres.
«Siento que es un compromiso muy grande que definitivamente, aunque la responsabilidad está repartida, es mucho trabajo y necesitamos de un gran equipo», afirmó Araceli López.
Por su parte, Rocío dijo:
«Estamos agradecidas con Dios por la confianza que nos tiene y confiadas en que Él va delante de nosotros».
Ambas concluyeron que aunque Blanca se retira de su cargo como directora, su legado perdurará en el CAMJ y continuará inspirando a todos los que luchan por un mundo más justo y equitativo.