Entrevistamos al asesor de la Dimensión de Justicia y paz en la diócesis local, sobre cómo los católicos deben asumir los efectos que se enfrentan por el alza a precios de combustibles.
Ana María Ibarra
Como una madre que se preocupa ante los conflictos de sus hijos, la Iglesia diocesana de Ciudad Juárez, en voz de la Dimensión de Justicia, Paz y Reconciliación, emitió un comunicado ante el alza a los combustibles por parte del Gobierno Federal, con precios que entraron en vigor el primero de enero de este 2017.
Buscar la paz
El padre Roberto Luna, coordinador de la citada dimensión, compartió que si bien la Iglesia durante algún tiempo no era tan participante en cuestiones de carácter social, hoy busca que la comunidad busque la paz en medio de los conflictos.
“Hemos visto que el Papa Francisco marca una pauta muy grande para ir interesándonos en todo lo que concierne a la búsqueda de la paz. La Iglesia influye con una actitud de esperanza. El creyente espera, aún en medio de los conflictos más incomprensibles, una solución, oración, amor y esperanza con una fe profunda y real”, dijo el padre Luna.
Manifestarse desde el evangelio
Ante las manifestaciones de inconformidad por los incrementos a los precios, que han surgido de parte de diversos sectores sociales, el padre Roberto dijo que la sociedad tiene el derecho de manifestar las realidades con las que está en desacuerdo.
“Así como se tiene libertad de religión, se tiene libertad para manifestar lo que afecta la vida de las familias. No podemos quedar indiferentes ante los reclamos que se dan, pero en nuestras posibilidades debemos mantener nuestra cordura como sociedad”, compartió el padre Luna.
Añadió que la Iglesia tiene el deseo de que los legisladores o cualquier orden de gobierno accedan a solucionar estos conflictos con el afán de que haya paz en la sociedad.
“El pasado primero de enero, el Papa Francisco nos presentó la no violencia como un medio para las decisiones políticas. Los católicos somos miembros de una sociedad, pero tenemos cruzado en el corazón el evangelio”, dijo.
Y al responder si los católicos deben participar en estas manifestaciones sociales, agregó:
“Demos, pues, testimonio de nuestro ser cristiano, participando, sí, pero de forma pacífica, dando a conocer lo que Dios desea para nuestra sociedad”.
“Con rencores o rivalidades nada podremos hacer, ellas someten una voluntad política para realizar acuerdos”.
Para finalizar, compartió que en dos mil años de historia, la Iglesia, como institución y miembro de la sociedad, ha enfrentado conflictos peores y hoy el panorama no es sino otro más.
“Como madre vieja y experimentada, la Iglesia puede ser faro de luz, esperanza y consuelo, pero es intrínseca la experiencia de la fe para comprender esta realidad, y así se da testimonio de ella en estas circunstancias….Siempre se puede luchar por la paz”, puntualizó.
Para saber…
La Dimensión de Justicia, Paz y reconciliación de la Diócesis de Ciudad Juárez, emitió un comunicado el pasado primero de enero con relación a este tema de las alzas a precios de energéticos… Puede leer el comunicado completo en la página dos.