- La Diócesis de Tabasco, a través de Cáritas, se ha volcado para ayudar a los damnificados gracias al apoyo que han enviado otras diócesis. Sin embargo, no han logrado cubrir todas las necesidades…
Ana María Ibarra
Con casi un mes prácticamente bajo el agua a causa de varios fenómenos naturales, setenta por ciento de las comunidades del Estado de Tabasco se han visto seriamente afectadas y miles de familias han perdido sus pertenencias, por lo que han salido de sus hogares para resguardarse en albergues.
Ante esto, la Diócesis de Tabasco, a través de Cáritas, se ha volcado para ayudar a los damnificados gracias al apoyo que han enviado otras diócesis. Sin embargo, no han logrado cubrir todas las necesidades.
Así lo explicó la hermana Eduviges Palacios, de la congregación hermanas Misioneras de María Dolorosa, y originaria de Ciudad Juárez, quien coordina Cáritas Tabasco y compartió la difícil experiencia que vive aquella diócesis que encabeza monseñor Gerardo de Jesús Rojas, quien fuera vicario general y muy querido sacerdote en la Diócesis de Ciudad Juárez.
Comunidades bajo el agua
En octubre pasado llegó el primer fenómeno natural a Tabasco, que ocasionó inundaciones en aproximadamente diez comunidades del centro del Estado, resultando afectadas más de 600 familias. El gobierno activó 74 refugios temporales, pero no fueron suficientes.
“En noviembre llegó el segundo huracán con más fuerza, ocasionando daños a la mayoría de las comunidades y afectando a casi 200 mil personas, aparte de las que se vieron afectadas en la primera inundación”, compartió la hermana Eduviges.
Agregó que tanto por parte del gobierno como de la Iglesia se han habilitado 700 refugios que se encuentran en la ciudad de Villahermosa y en el resto de los municipios.
“Las comunidades están totalmente en el agua, ha sido el gobierno quien los ha sacado de sus hogares para llevarlos a los refugios. Aunque ahorita ya no está lloviendo, los ríos se están desbordando ya que se está desahogando la presa poco a poco y esa agua va a los ríos, por lo que las comunidades se siguen afectando”, explicó.
En la sierra de Tabasco el agua ha ido bajando, pero muy lentamente, de acuerdo al reporte de uno de los sacerdotes.
“Estamos tratando de llegar a la mayoría de las comunidades, aprovechando la red de pastoral social de la diócesis para comunicarnos con los sacerdotes que se encuentran en los lugares más afectados”, señaló.
Agregó que, con esta red, se está llegando a los últimos rincones de la diócesis, donde incluso, el gobierno no llega.
“Estamos apoyando con los donativos de la gente que de buena voluntad quiere sumarse a esta misión, estamos tratando de responder en este momento a la necesidad emergente qué consiste en abastecernos de alimentos y medicamentos para las comunidades”, dijo la religiosa.
Explicó se han visto en la necesidad de pasar por alto los protocolos de salud que les indicaron evitar la donación de ropa.
“En este momento existe mucha gente que se quedó sin nada, nos piden ropa porque se quedaron únicamente con lo que traían puesto y tenemos que cubrir esa necesidad también”, dijo.
Diócesis apoyan
Agradecida con Dios, la religiosa añadió que han recibido apoyo de distintas Cáritas diocesanas que han enviado medicamento, víveres y ropa, lo cual se entrega conforme va llegando. También llegan donativos económicos, que se usan para comprar lo necesario.
Existen aproximadamente 30 albergues de la Iglesia, pero también se envían los suministros a los albergues del gobierno que solicitan el apoyo.
La religiosa compartió que la Diócesis de Tabasco se divide en seis zonas pastorales, cada una de ellas coordinada por un sacerdote de pastoral social, que informa sobre su situación y necesidades. “Es información confiable”, aseguró.
Agregó que Cáritas Mexicana les ha apoyado mucho con despensas.
“La semana pasada, sumando las diócesis de Chiapas, Guatemala, Honduras, se abrió lo que llamamos la colecta nacional de Cáritas para apoyar a Tabasco, a Chiapas y a los países que están afectados por estos huracanes”, indicó.
Se juntaron huracán y pandemia
No obstante el apoyo, las necesidades rebasan el trabajo que se está realizando, además, se deben preparar para lo que viene
“Hemos llegado cuando mucho al treinta o cuarenta por ciento de los afectados. Ahorita lo más emergente es cubrir con medicamentos y víveres, pero después viene el trabajo en cuanto a la limpieza y reconstrucción de sus casas”, compartió.
Por ello el apoyo debe continuar y se requiere la solidaridad de mucha gente.
“Aquí en Villahermosa algunas casas quedaron totalmente destrozadas, la mayoría de las familias está en los refugios, pero hay personas que se resisten a salir por dos motivos: por miedo a que les roben lo poco que les queda, y otro es por miedo a los contagios de Covid”.
Para la hermana Eduviges, es precisamente la situación de la pandemia lo que dificulta los apoyos, pues existe un riesgo de contagio en los refugios.
“Por mucho que queramos llevar a cabo los protocolos de salubridad, no logramos hacerlo, pues es mucha la gente que se encuentra en los refugios. Tuve la oportunidad de visitar algunos albergues y la gente está muy temerosa”, compartió
Igualmente la gente está temerosa por el pronóstico de un nuevo huracán en la semana que recién concluyó.
“La presa seguirá llenándose y los ríos también, y deben ir desahogándose poco a poco. En algunas comunidades ya bajó el agua, pero la gente no puede regresar a sus casas porque corren el riesgo de derrumbe por lo remojadas que quedaron”.
La religiosa compartió que un setenta por ciento del estado de Tabasco se encuentra bajo el agua.
Lo que más se requiere
La ayuda que la Diócesis de Tabasco requiere, en cuanto al medicamento, es todo aquello que proteja de contra enfermedades de las vías respiratorias, para evitar dar entrada al Covid-19.
“Nos están solicitando paracetamol, jarabes para la tos, para alergia, pero sobre todo también para hongos en los pies porque la gente estuvo mucho tiempo en el agua y es agua sucia por tanta basura que trae la corriente, la gente tiene mucha infección en sus pies”.
Pide oración
La hermana Eduviges invitó a la comunidad juarense a orar mucho por el pueblo tabasqueño, y en la medida de sus posibilidades sumarse a apoyar con donativos y los artículos que se requieren.
“Quizá no podamos solucionar toda la necesidad que deja estas inundaciones, pero los exhorto a la solidaridad con el pueblo tabasqueño que está sufriendo mucho, primero por la pandemia y ahora con la inundación, que son golpes muy fuertes”.
“Los invito que nos ayuden en la medida de sus posibilidades… ayudaría muchísimo sumar el apoyo de Ciudad Juárez y El Paso al esfuerzo que hacemos por las comunidades”.
Hna. Eduwiges Paslacios MMD, Cáritas Diócesis de Tabasco
Donativos a Cáritas Mexicana
Cuenta: 0123456781 BBVA Bancomer
CLABE: 012 180 001234567815
A nombre de Cáritas Mexicana I.A.P.