Hoy viernes concluye el retiro que vivieron sacerdotes de la Diócesis de Ciudad Juárez en Mesilla, Nuevo México. Sigamos orando por ellos.
“Amen mucho a Jesús nuestro Señor y sirvan con alegría a los fieles”
Fue la invitación que hizo el arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera, a los 56 sacerdotes de la Diócesis de Ciudad Juárez que participaron en el retiro al presbiterio impartido en el centro La Santa Cruz, de Mesilla, Nuevo México.
“El objetivo es animarlos en la misión, que nuestra vida al servicio de la comunidad sea fruto de una gran conversión espiritual”, dijo el arzobispo, quien fue invitado por don José Guadalupe a esta frontera.
Explicó que centró las reflexiones en el Evangelio de San Juan, pues, dijo citando al papa emérito Benedicto XVI, “la palabra de Dios tiene que ser nuestra guía y el corazón de la vida del sacerdote y de su apostolado”.
Así, monseñor Cabrera abordó los temas de la itinerancia, la búsqueda y el encuentro con Cristo.
“El que quiera ser encontrado por Dios tiene que ponerse en camino, el que quiera que Dios lo encuentre, también tiene que buscarlo… los sacerdotes necesitamos sentir el encuentro con el Señor”, explicó.
Experiencia valiosa
Por su parte el padre Benjamín Cadena presidente del presbiterio de Ciudad Juárez, dijo que el retiro siempre es una experiencia muy valiosa para el clero.
“El aporte (de mons. Cabrera) va en el sentido de cómo revitalizar nuestra estructura espiritual, cuáles son nuestras conclusiones para abordar la evangelización, nuestra identidad y misión, y cómo tenemos que fortalecernos en esas fuentes, de lo contrario las tentaciones son el clericalismo, el autoritarismo, que nos impiden expresarnos comunitariamente con el pueblo de Dios” dijo el padre Benjamín.
Al hablar sobre lo valioso de estos momentos para el sacerdote, el entrevistado expresó:
“Estamos en un tiempo en que también como clero resentimos que hay una crisis impresionante y profunda de valores, de identidad, justo por la transformación social… experimentamos como creyentes también desencantos, desilusiones, crisis”
Y dijo que esperan que este retiro tenga frutos abundantes.
“Esperamos que tenga efecto en nuestras comunidades, que se sientan animadas, valoradas, acompañadas y podamos a nivel de diócesis abordar esos desafíos que se están presentando en nuestra frontera con la problemática que ya sabemos, y que toca la cuestión de la fe”, finalizó.