Diana Adriano
Religiosas que viven su ministerio en la Diócesis de Ciudad Juárez participaron en un retiro espiritual de Cuaresma que organizó el equipo base de la Dimensión de Vida Consagrada, el pasado sábado 4 de marzo.
Reavivar el llamamiento
Con sede en la parroquia Santísimo Sacramento, el retiro contó con la participación de alrededor de 40 mujeres consagradas de las 16 congregaciones religiosas con presencia en la diócesis.
“Hoy estamos viviendo el retiro del mes, correspondiente a la Cuaresma, y sobre todo que la Dimensión de Vida Consagrada está preparado para ayudar en su crecimiento espiritual de todas las religiosas de la diócesis”, dijo el padre Gregorio López, MNM coordinador diocesano de la dimensión.
Dijo que el tema del retiro fue sobre renovar el llamamiento de consagrados y la vivencia en su comunidad, de manera especial en llamado a la conversión.
“Es importante este llamado a la conversión para que puedan reanimar su llamamiento personal, que se vive dentro de la comunidad”, añadió el sacerdote.
Las religiosas se centraron en la oración y la meditación durante el retiro. También participaron en una temática que las invitaba a profundizar en su relación con Dios y a prepararse para la Semana Santa.
«Es un momento importante de reflexión y crecimiento espiritual», destacó el padre Gregorio.
Oración por la vida consagrada
Dijo que al igual que los laicos necesitan un reavivamiento, sin duda, los consagrados también.
“El señor obispo ha establecido esta Dimensión de Vida Consagrada, encabezada por un servidor, con una misión de ayudar espiritualmente a los consagrados, porque es la labor que tiene la diócesis: dijo.
Reflexionó en el hecho de que los consagrados necesitan ese momento para hacer una reflexión interna, y que esto se refleje en el crecimiento personal de cada uno y su apostolado.
Las religiosas participantes se mostraron en todo momento muy contentas, dispuestas y agradecidas durante el encuentro.
“A todos los laicos les pedimos que siempre tengan en sus oraciones a la Vida consagrada de nuestra diócesis, tenemos distintos carismas y apostolados, pero estamos agradecidos por este don y regalo que tenemos”, concluyó el sacerdote, de los Misioneros de la Natividad de María.