Diana Adriano
La parroquia Mater Dolorosa comenzó un proyecto de catequesis para que niños con discapacidad también puedan prepararse y recibir el sacramento de la Eucaristía.
La iniciativa es coordinada por Hilda Ramirez Rivera, conocida cariñosamente como «Miss Hilda», quien, con amor, creatividad y profunda fe, ha transformado la manera en la que se transmite el mensaje de Dios a niños neurodivergentes.
“Tenemos niños con autismo, con trastorno por déficit de atención e hiperactividad, parálisis cerebral, ceguera… cada niño tiene una necesidad distinta, y aquí buscamos que todos se sientan amados y escuchados”, dijo la entrevistada.
Metodología utilizada
El aula de Miss Hilda no es convencional: está llena de colores, instrumentos musicales, franelógrafos, pictogramas y carpetas interactivas que ayudan a los pequeños a comprender, a su modo, el amor de Dios.
Fue en abril de 2020, cuando, en plena pandemia, Miss Hilda perdió a su hija Gisel a causa de un tumor en los riñones. A pesar del duelo, continuó sirviendo como coordinadora de catequesis en la parroquia Sagrado Corazón de Jesús.
Fue allí donde Dios puso en su camino a niños con discapacidad. “Era como si Dios me fuera preparando el corazón”, compartió.
En 2023, el padre Javier Calvillo, amigo y guía espiritual de Hilda, la invitó a iniciar una catequesis especial en Mater Dolorosa, donde es párroco.
“Me dijo: ‘Anímese, usted tiene método’. Y yo acepté, confiando en que Dios me daría las herramientas”, dijo.
En septiembre de ese año, inició formalmente el curso, con alrededor de 15 niños. Desde entonces, varias generaciones de pequeños han accedido al sacramento.
“Los papás llegan con miedo, con dudas, a veces a la defensiva. Pero cuando ven el amor con el que tratamos a sus hijos, se relajan, se alegran, se sienten acompañados”, afirmó.
“Ellos viven un duelo constante. No es solo cuando reciben el diagnóstico. Es cada día, cuando sus sueños para sus hijos cambian”, reflexionó.
Perseverancia
Actualmente, miss Hilda también prepara un grupo de perseverancia para niños neurodivergentes y los padres que deseen seguir creciendo en la fe.
La catequista explicó que han estado diseñando cajas especiales para guardar los recuerdos de Primera Comunión, como la túnica, vela y libros, que podrían ponerse a la venta en la librería parroquial para ayudar a sostener el proyecto.
“El padre y yo sabemos que esto no puede depender de una sola persona. Ya estamos pensando en formar a nuevos catequistas, para que más parroquias puedan ofrecer este tipo de catequesis”, indicó.
Para saber…
El nuevo curso en Mater Dolorosa comenzó el sábado 26 de julio en Mater Dolorosa.
Interesados llamar a la parroquia, al te 656 619 29 22 o seguir la página “Amiguito Católico” en redes sociales.
En frase…
“Dios me puso esta misión. Yo no soy eterna, pero quiero que esto siga. Los niños con discapacidad también tienen derecho a conocer y amar a Dios, a sentirse parte de su Iglesia”. Miss Hilda