Ana María Ibarra
Con gran fervor guadalupano y la intención por la paz en las familias y en la ciudad, más de ocho mil personas asistieron a la Magna Peregrinación Guadalupana, en la que desbordaron su amor a Santa María de Guadalupe caminando por espacio de cuatro horas.
El magno evento se llevó a cabo el pasado domingo 3 de diciembre, saliendo del cruce de Avenida de Los Aztecas y Boulevard Zaragoza en punto de las 10 de la mañana, con destino al templo de Nuestra Señora de Guadalupe, Catedral.
Pidieron por la paz
Este año, las comunidades y grupos participantes llevaron en su corazón y algunos cartelones y playeras, sus oraciones por la paz en las familias y en Ciudad Juárez.
Así mismo, representaron en sus carros alegóricos las apariciones guadalupanas, pero también, con motivo de los 100 años de las apariciones de Nuestra Señora en Fátima, representaron este acontecimiento mariano.
Otro motivo que los organizadores incluyeron en la peregrinación fue el 60 aniversario de la Diócesis de Ciudad Juárez, por lo que el Equipo Coordinador y el Equipo de Orden, portó camisetas alusivas.
Por su parte, el grupo juvenil de San Martín de Porres representó Las Bodas de Caná portando una lona donde se leyó: “Cuando María ruega, todo se obtiene, nada se niega”, dejando en claro la fe en Santa María.
Devoción Guadalupana
Como una expresión de religiosidad popular, los devotos de la Virgen de Guadalupe dejaron brotar su fervor, llevando en su caminar el pago de una manda, su agradecimiento o una solicitud de intercesión en alguna necesidad.
Conforme avanzó la gran peregrinación, más fieles se iban uniendo; algunos de ellos salieron de sus casas al escuchar los rezos, cantos y danzas, otros ya esperaban el contingente para agregarse.
Los organizadores lograron distinguir entre los fieles, personas provenientes de las diócesis de El Paso, Texas y Las Cruces, Nuevo México; también un grupo pro vida se hizo presente para pedir a María por las familias.
La Comunidad Mazahua es una de las más constantes cada año, y a través de su cultura particular ofrecieron sus cantos y rezos a la Señora de Guadalupe.
Un año más
Al frente del contingente iba la Banda de Guerra de la preparatoria CETIS 61. Además, el evento contó con la presencia de 22 grupos de matachines.
Los sacerdotes que acompañaron a los peregrinos fueron el padre Rodrigo Cuevas, fundador de la Magna Peregrinación; el padre Aristeo Baca, párroco de Santa María de Montaña y el padre Juan Herrera, párroco de Santo Toribio de Mogrovejo.
En punto de las 2:30 de la tarde, los peregrinos arribaron a la Catedral, y aunque no todos lograron entrar en el templo, agradecieron a Dios y a María de Guadalupe haberles permitido cumplir un año más con ese compromiso y sacrificio de fe.
Fueron los sacerdotes Juan Herrera y Aristeo Baca quienes presidieron la Eucaristía en la Catedral y en la Misión de Guadalupe, respectivamente, poniendo en el altar del Señor las intenciones de los fieles.
Frase…
“Queremos agradecer a la comunidad su amor a María en la advocación de Guadalupe. Los invitamos a que sigamos unidos en oración, pidiendo por la paz familiar y la paz en la ciudad y en todo México para no caer en los errores de años pasados”.
Guadalupe Chávez, organizadora del evento.
Algunos participantes
Pastoral Penitenciaria,
Comunidad Mazahua,
Locatarios del Mercado de abastos,
El Señor de los Afligidos,
San Martín de Porres,
Santa María de la Montaña y sus capillas,
Santo Toribio de Mogrovejo,
Capilla Nuestra Señora de Fatima y
Capilla Jesús Hijo de María