Ana María Ibarra
Con la presencia del obispo diocesano, don J. Guadalupe Torres Campos, el pasado 5 de febrero la comunidad parroquial de San Felipe de Jesús celebró a su santo patrono, el primer mártir mexicano.
Pide oraciones por don Renato
Al inicio de la celebración, el obispo dio la bienvenida a quienes participaron de manera presencial, de igual manera saludó con su afecto de padre y pastor a todos los que siguieron la transmisión a través de las redes sociales.
Monseñor Torres ofreció la Eucaristía por toda la comunidad diocesana, por los sacerdotes, por la comunidad parroquial de San Felipe, y por el obispo emérito, monseñor Renato Ascencio León, quién, dijo, se encuentra un delicado de salud.
Después de la proclamación del evangelio a cargo del padre Juan Carlos López, párroco de la comunidad, el obispo dirigió un mensaje reflexivo.
“Estamos llamados a seguir a Jesús. Cristo comienza su predicación: ‘el Reino está cerca’, escuchamos en el evangelio de San Lucas, a todos nos llama, hoy me sigue llamando y te sigue llamando. Es una decisión libre, consciente”, dijo.
Añadió que la invitación de Jesús implica la renuncia de uno mismo, dejar el egoísmo.
“Tomen su cruz de cada día y síganme, dice Jesús. Seguir a Jesús es testimoniar nuestra fe, no sólo de palabras, sino con la vida. San Felipe de Jesús es ejemplo para nosotros pues siguió a Jesús hasta el martirio”.
San Felipe, hoy
Añadió que la figura de san Felipe tiene mucho sentido hoy para México, para la ciudad, para los cristianos.
“Seguimos siendo una Iglesia perseguida, quien decide seguir a Jesús con sinceridad, va a recibir al cien por uno muchas cosas, pero también será perseguido. Dios aceptó la sangre de Felipe como una oblación”, explicó.
La entrega, dijo el obispo debe ser en todo momento, en la escuela, en el trabajo, en la familia.
“En sentido literal, en muchos lugares por ser cristianos muchos han sido asesinados. Felipe nos da ejemplo de fidelidad, de perseverancia, de seguir a Jesús”, dijo para luego invitar a la comunidad a seguir al Señor, con la certeza de que Él no abandona y dará su luz y su gracia.
“Pidamos a Dios, por intercesión de san Felipe, fortalezca nuestra fe, aumente nuestra fidelidad, nuestra constancia y perseverancia”.
Antes de concluir la celebración, el padre Juan Carlos agradeció al señor obispo su presencia esa tarde y a la comunidad por hacerse presente también en la hora santa que se celebró el día anterior, jueves 4 de febrero.
“Si bien, esta condición de pandemia no permite reunirnos a toda la comunidad, algunos miembros están aquí. Nos alegra su presencia, señor obispo, su testimonio”, expresó y pidió un aplauso para monseñor Torres.
Enseguida el obispo dio la bendición y el padre Juan Carlos despidió a la comunidad.
Frase…
“Felicidades a la parroquia, a todos en esta fiesta patronal, gracias por su colaboración y que San Felipe interceda por todos nosotros. Muchas felicidades por nuestra fiesta patronal”.