Presencia
Hogares en varios estados del Norte de México padecieron en días pasados las inclemencias del clima y las consecuencias que esto trajo al suspenderse los servicios de electricidad, abasto de agua e incluso un suministro de gas en peligro.
De acuerdo a lo publicado en medios de comunicación, la situación estuvo relacionada con la falta de abasto de Gas Natural proveniente de Estados Unidos, debido a problemas generados por una de las peores tormentas invernales de que se tenga memoria. En Ciudad Juárez las temperaturas por debajo de los cero grados ocasionaron un caos parecido al que se vivió en 2011, y los habitantes debieron lidiar con muchos asuntos domésticos, comenzando por la falta de luz y agua, tuberías reventadas por el frío, entre otros asuntos.
Por eso la pregunta de esta semana es:
¿Qué opina de la crisis en los servicios ante la contingencia climática y la respuesta de los gobiernos? ¿Podríamos prepararnos mejor gobierno y ciudadanía?
Me gustaría iniciar comentando que la naturaleza nos vuelve a recordar la fragilidad humana, nos recuerda el lugar que ubicamos en Creación y tener la mirada puesta en Dios.
En cuanto a los servicios, es bueno rememorar que la afectación más seria fue la de la electricidad ya que de ella depende el funcionamiento del servicio del agua. Los cortes aleatorios de electricidad que anunció la CENACE no sucedieron sólo en los estados afectados por la contingencia climática, sino en otros. Lo que nos hace pensar que no sólo el clima fue el que ocasionó esta afectación, sino las malas decisiones que ha tomado el gobierno federal en distintos temas. Este tipo de sucesos me parecen un reflejo de lo que es el actual gobierno de la 4T, una incompetencia para atender los problemas fundamentales que afectan de manera significativa a la ciudadanía.
Ahora, como consecuencia de los cortes del servicio de luz, los pozos de agua potable se vieron afectados, lo que generó el desabasto en la ciudad, pero pienso que el anuncio de prevención a la ciudadanía se generó por parte del gobierno del estado y del municipio; sin embargo, en la ciudadanía no existe una cultura de prevención para este tipo de contingencias. Esto tiene que hacer reflexionar a los distintos ámbitos de gobierno sobre las estrategias de comunicación.
En cuanto al servicio de gas natural, me parece que las empresas privadas que lo administran han tomado una buena decisión en dar prioridad a los servicios esenciales, como es el de la salud, y dejarlo para uso en las viviendas. Con respecto a esta decisión también es importante considerar el impacto en la economía por la afectación a múltiples empresas.
Fuera del arduo trabajo que costó reestablecer los servicios y la desorganización que se evidenció en los tres ámbitos de gobiernos para manejar la contingencia, cabe también señalar la solidaridad y caridad juarense.
Mtro. Ramón Enrique Rodríguez/ Grupo Caridad y Verdad
Por definición una contingencia es algo que se puede esperar que suceda, siendo así, en lo particular, es prudente que una persona o familia esté preparada ante distintas eventualidades como tener velas o lámparas de mano ante la posible falta de energía, cobijas, ropa o combustibles para fríos extremos, o alimentos de larga caducidad ante una posible escasez. En el caso de los entes públicos, más que esperar prudencia en sus acciones, es una cuestión de responsabilidad con la población ya sea de un municipio, un estado o el país entero. Por ello, ante la gran responsabilidad que representa el servicio público, lo menos que se puede esperar de quienes están al frente de las distintas instituciones y esferas de gobierno, es que estén preparados para enfrentar contingencias de manera ágil y efectiva, garantizando los servicios básicos con calidad a la población.
La sociedad actual ya no acepta excusas, las autoridades no pueden seguir responsabilizando a las lluvias por los baches, a la falta de gas por los apagones o al cambio climático por la falta de gas. Sin duda todas las personas en los distintos sectores públicos y privados, debemos asumir nuestra responsabilidad en construir un mejor futuro para la sociedad, pero el servicio público implica asumir una responsabilidad especial, una responsabilidad mayor. Las contingencias climáticas cada vez son más frecuentes y devastadoras, consecuencia de un cambio climático generado por un acumulado histórico de acciones y omisiones de las distintas esferas de gobiernos, que por décadas han sido tolerantes de un sinnúmero de actividades industriales y comerciales altamente contaminantes, que por ser un problema de orden mundial, localmente se tiende a evadir responsabilidad, tanto en el sector público como en el privado, ignorando que todo empieza desde lo local.
Abelamar Chacón Rodríguez/ Plan Estratégico de Juárez
La principal obligación de los gobiernos es el proveer los servicios públicos necesarios para garantizar la seguridad integral de las personas. El ex alcalde Francisco Villarreal Torres decía que un problema técnico jamás se podía solucionar con una respuesta política.
La prestación de los servicios públicos requiere de análisis, planeación, inversión, una buena operación y preparación para los diferentes escenarios que se puedan contemplar, que se presentan en la vida de una comunidad.
En este caso es entendible que mucho del problema se dio por una cuestión climatológica es un evento que no había sucedido en más de ciento cincuenta años y que se debe precisamente al sobrecalentamiento de las aguas del mar y según como se está presentando ahorita este año, se está reflejando en tormentas invernales, pero también podemos prever durante el año lluvias abundantes o ciclones, entonces la parte de la preparación y de estar contemplando los diferentes escenarios posibles que se pueden enfrentar en los escenarios de los servicios públicos, es sumamente importante así como la inversión.
Uno de los grandes problemas que tenemos actualmente en el país es un ambiente de división y de polarización y eso no ayuda para nada, porque hasta para hacer un análisis simple no sabemos verdaderamente dónde le está doliendo al país, porque lo único que escuchamos son mensajes políticos y a veces hasta ideológicos y ahorita la politización y el manejo de la ideología no sirve para nada cuando se enfrenta a una problemática técnica en donde si no se da una respuesta adecuada se pone en riesgo la vida de las personas.
Se alcanzaron a ver muchas deficiencias, una falta de preparación y también, de no inclusión de escenarios, lo cual se nos está dejando como experiencia de que se requiere planear mejor y hacer las inversiones adecuadas para garantizar mejor la seguridad.
Lo que queda evidente es que unas comunidades tan grandes como son las afectadas en el norte del país vemos que su seguridad cuelga de hilos, y eso nos da un mie-do a todos los ciudadanos darnos cuenta de nuestra vulnerabilidad, por lo que tenemos que exigirle a los gobiernos que hagan un mejor trabajo, una mayor preparación e inversión en estos temas, porque todo este tipo de eventos por el cambio climático, se prevé que puedan ser más seguidos, pero también con mucha irregularidad, lo cual presenta un gran reto. Entonces, más trabajo y menos política o más bien: no política, más trabajo y menos politiquería .
José Mario Sánchez Soledad/ Empresario
Esta semana vivimos una situación sin precedentes que sin duda esta ocasionando afectaciones en los comercios por la rmergencia que se ocasionó minutos antes de las 7:00 horas el lunes pasado, y provocó que varios comercios en la ciudad no abrieran sus puertas debido a que no contaban con servicio eléctrico y en algunos sectores de la ciudad no contaban con agua, empresas comenzaron a regresar a sus trabajadores a sus casas ya que no existían las condiciones para que éstos pudieran operar o permanecer en las instalaciones lo que se traduce en pérdidas para miles de negocios.
Se estima que el 90 % de los comercios resultaron con afectaciones y estos no contaban con plantas de emergencia generadoras de energía.
Fue una situación de emergencia la que vivimos y esperamos que no suceda de nuevo ya que el comercio intenta salir de una etapa muy adversa y este tipo de situaciones no permiten que se pueda obtener una recuperación económica.
También esta misma semana recibimos otra mala noticia de la única empresa de gas natural que existe en la ciudad. Me refiero a que todo el sector industrial y ahora sectores comerciales han tenido corte de este energético debido a que los proveedores de la empresa gasera interrumpieron el abastecimiento de éste, el cual nos ha dejado un nuevo reto, donde la situación se vuelve muy complicada para los negocios.
Sin duda le gobierno federal debería de prever este tipo de situaciones ya que los apagones que vivimos fueron por la carencia de capacidad en la administración de la Comisión Federal de Electricidad que no se preparó para enfrentar este tipo de emergencia al no abastecerse de este energético.
Rogelio González Alcocer Presidente de la Cámara Nacional de Comercio Servicios y Turismo de Ciudad Juárez