Ana María Ibarra
Confiados en la misericordia del Señor, sacerdotes de la diócesis concluyeron sus ejercicios espirituales impartidos por el padre José Marcos Alba, siendo el mismo quien presidiera la misa de clausura.
“En nuestra vida todo es bendición, hasta las cruces. El centro del mensaje de Jesús es que el llamaba al Reino. Hemos recibido esta bendición de trabajar por su Reino. Siempre habrá cosas que se opongan a ese Reino, pero debemos creer que el bien es más fuerte que el mal”, expresó el padre José Marcos en su homilía.
Agradecidos por su vocación y por la confianza que Dios ha puesto al llamarles, los sacerdotes concluyeron los ejercicios llevando de esta experiencia como fruto el impulso a trabajar fielmente por el Reino de Dios en esta diócesis de Ciudad Juárez.