Diana Adriano
La barda perimetral de la parroquia El Señor de la Misericordia luce los rostros de diferentes santos, elaborados con material reciclado de la mano del laico Eusebio Amaya Villa, fiel colaborador de la Iglesia, que fue llamado a la Casa del Padre el pasado 3 de enero.
Don Eusebio, como era conocido, fue una persona que llenó de alegría y optimismo a todo el que lo conocía. Durante su vida siempre mostró un enorme amor a Cristo, que era el motor principal que lo impulsó a ayudar a los demás y a la Iglesia.
Esto mismo fue lo que lo motivó a participar en el proyecto del arquitecto y maestro de la UACJ, Miguel Holguín, consistente en reutilizar material de scrap de azulejo, espejos, cantera, etcétera. Para crear murales con imágenes religiosas a lo largo de la barda de la parroquia.
Desde el inicio de la pandemia, don Eusebio decidió unirse al proyecto y trabajar en los murales dándoles su toque personal.
Fue el 11 de abril del 2021 cuando el señor obispo don José Guadalupe Torres y el padre José Solís (qepd), fueron los encargados de impartir la bendición a la primera etapa del trabajo.
“Yo me siento más que feliz, me siento muy contento de realizar este trabajo que nos ha servido de terapia en esta pandemia. Quiero agradecer a Radio Guadalupana, porque me ha servido de inspiración para hacer estos trabajos, sobre todo la Virgen de Guadalupe, imagen que le he dedicado a mi madre”, compartió don Eusebio a Periódico Presencia en aquella ocasión.
Homenaje a su memoria
Con profunda tristeza, la comunidad diocesana recibió la noticia del fallecimiento don Eusebio y en un homenaje póstumo, el arquitecto Miguel Holguín, junto con la familia Amaya, decidieron colocar una placa en su memoria, justo en el mural que don Eusebio dedicó a la Virgen de Guadalupe.
La placa fue develada el pasado 23 de marzo, y será un recordatorio del arduo trabajo hecho por el laico, quien era un fiel radioescucha de Radio Guadalupana.
“Agradezco al arquitecto por el gran cariño en tan poco tiempo que le tuvo a mi esposo, que llegaba y ponía su carpa, su Radio Guadalupana y se ponía a trabajar”, compartió Estelita Amaya, esposa de don Eusebio, durante la develación.
“Don Eusebio, ya era todo un personaje aquí en la parroquia, se dio a conocer y a querer por todos, siempre muy servicial, sin duda deja un gran hueco en nuestro corazón, pero tenemos la certeza de que ya está con nuestro Padre”, añadió el arquitecto.
Previo a la develación, los asistentes caminaron admirando el trabajo en los murales, acompañados de las cenizas de don Eusebio, las cuales fueron cargadas por su hermano, Tomás Amaya Villa.
Acto seguido, todos se dirigieron a la comunidad de la Sagrada Familia en la que vivieron la celebración de la Santa Misa en acción de gracias por la vida de Eusebio Amaya.
Para saber…
Se invita a los fieles a cuidar estos murales para que puedan durar más tiempo. Igualmente reportar cualquier daño o sar aviso si alguien los está dañando.