Diana Adriano
El padre Jorge Pablo Lozano, asesor diocesano de Pastoral Catequética, ofreció también algunas recomendaciones por si se decide llevar niños a las celebraciones de manera presencial.
“Tenemos que ir adaptándonos a esta nueva etapa que estamos viviendo durante las celebraciones, tenemos que tener en cuenta que el virus aún no se ha ido y está en nosotros. Tener la responsabilidad para no propagarlo”, dijo
Recomendaciones con los niños
* Llevar a los niños siempre y cuando estén quietos en los templos; sabemos que hay niños que no pueden estar mucho tiempo sentados y quieren andar caminando por todo el templo, eso hay que evitarlo.
* No hay que arriesgar a los niños que aún están en los brazos; Si los bebés comienzan a llorar esto implicará que los papás tengan que salir con él y queremos que haya el menor movimiento dentro del templo, evitando así un posible contagio.
* Llevar niños de nueve años en adelante; niños un poco más grandes, que ya comprenden lo que se esta celebrando durante la Santa Misa y así ellos también puedan vivirla de manera correcta.
* Siempre queda la posibilidad de seguir viviendo la misa a través de redes sociales o canales de televisión.
¿Y los monaguillos?
Los monaguillos son los niños encargados de ayudar al sacerdote, especialmente al celebrar la Santa Misa, por esta razón en este tiempo de retorno a las celebraciones queda la interrogante de qué pasara con ellos en este retorno a los templos.
Se informó que por el momento no se tiene una indicación del retorno de los monaguillos a su servicio en el altar, esto en respuesta al cuidado de su salud.
En la mayoría de los casos, los ministros religiosos de cada parroquia son los encargados de realizar las funciones que efectuaría un monaguillo en el altar.
Prevención y control
En caso de que se requiera el servicio de algún monaguillo en la celebración Eucarística, se solicita que:
- Mantenga la debida sana distancia
- Uso constante del gel anti-bacterial
- Uso de cubrebocas obligatorio
- Uso de careta
- Toma de temperatura
- Seguir las recomendaciones del sacerdote y los servidores a cargo