Diana Adriano
La mañana del 10 de mayo, la comunidad de la parroquia Nuestra Señora del Sagrado Corazón vivió un emotivo y fraternal encuentro para celebrar a las madres. El evento tuvo lugar en el salón de eventos El Saguán, donde decenas de fieles, especialmente personas mayores, se reunieron para compartir, convivir y fortalecer los lazos comunitarios.
La iniciativa fue organizada por los servidores de la comunidad, representados por Laura Lorena Pérez y Óscar Efraín Chávez Lomas, quienes destacaron la importancia de crear espacios de unidad y cercanía en la comunidad.
“Este tipo de encuentros son una manera de celebrar a nuestras mamás, apoyar a la parroquia y seguirnos uniendo como comunidad. Hay mucha gente mayor en nuestro sector, y este tipo de convivencias los reanima, les da alegría. Se abrazan, se platican, se sienten acompañados”, expresó Laura.
Al ingresar al salón, las madres fueron recibidas por un hermoso espacio decorado especialmente para la ocasión, donde tuvieron la oportunidad de tomarse fotos del recuerdo, creando momentos inolvidables.
Asimismo, durante la mañana las y los asistentes disfrutaron de un desayuno tradicional que incluyó chilaquiles con pollo y frijolitos. Además, se llevaron a cabo rifas y se entregaron obsequios especialmente pensados para las madres presentes.
La organización también agradeció a los dueños del salón El Saguán por brindarles el espacio y todas las facilidades necesarias para llevar a cabo este evento tan especial.
Desayuno con causa
Más allá de la celebración, el encuentro tuvo también un propósito especial: continuar con los esfuerzos para restaurar los vitrales de la parroquia, algunos de los cuales tienen más de 70 años y necesitan una reparación urgente.
“Estamos caminando hacia el 75 aniversario de nuestra comunidad, y queremos que nuestra Iglesia luzca como merece. Empezamos por los vitrales, que son parte del alma del templo”, comentó Óscar Efraín.
La comunidad se mostró muy participativa y agradecida con su párroco, quien brindó la motivación necesaria para llevar a cabo el evento.
“Nos sentimos muy bendecidos por todo esto. Todo lo hacemos para gloria del Señor y de María Santísima. Seguimos en pie, seguimos caminando como comunidad”, concluyó Lorena
