Ana María Ibarra
Después de más de tres años de espera y con una respuesta que rebasó expectativas, se abrió la extensión del Instituto Diocesano de Teología en la parroquia San Francisco de Asís.
Francisco de la Cruz y Norma Pacheco, quienes junto con Adriana Reyes atienden los dos grupos que se abrieron, compartieron su alegría por la participación de la gente.
Iniciativa laical
Francisco de la Cruz, evangelizador de tiempo completo, fue director de la extensión Santa Teresa de Jesús, ahí Norma fue su alumna y fue ella quien buscó que se autorizara la extensión del instituto en dicha comunidad, por petición del padre Alfonso García, su párroco.
“Soy servidora de la parroquia, en iniciación cristiana para adultos y como ministro. El padre Alfonso supo que soy graduada del instituto, extensión Santa Teresa, de ahí le surgió la inquietud de que tuviéramos una comunidad preparada, que estuviera a la altura de esta formación. Gracias a Dios la comunidad respondió”, dijo contenta Norma.
Hace tres años, Norma gestionó con el padre Ramiro Rochín, director del instituto, para que se abriera la extensión, sin embargo, el sacerdote le pidió esperar.
“Después se atravesó la pandemia. El año pasado volvimos a ir con el padre Rochín y nos pidió que nos esperáramos un año más. Bendito sea Dios, este año nos llamó para que empezáramos a hacer planes para abrir en agosto”, compartió entusiasta.
Laicos bien formados
Después de un arduo trabajo para promocionar por todo el decanato la apertura de la extensión, finalmente en agosto iniciaron las clases con una respuesta de 80 fieles inscritos, por lo que Norma invitó a Francisco de la Cruz, quien fue su maestro en Santa Teresa, a que les apoyara.
“Tengo cinco años impartiendo clases en las extensiones del instituto. Estoy muy contento porque este es un grupo muy participativo y atento, preguntan y expresan sus dudas”, expresó Francisco.
En esta extensión se abrieron dos grupos, y tanto Norma como Francisco se sienten satisfechos, no por ellos mismos, sino porque saben de la importancia de un laico bien formado.
“Es muy importante saber teología porque es una manera de conocer más a Dios y si lo conozco más, lo puedo amar y si lo amo le voy a servir de corazón, podré conocer su voluntad y llevarla a cabo”, señaló Francisco.
“En realidad no esperábamos tanta respuesta. Gracias a Dios hay personas de otras parroquias. Ojalá y se abrieran más extensiones. Hace falta que la comunidad esté formada. Conocer nuestras raíces como Iglesia es muy importante, así podemos permanecer en nuestra fe. Aprender, conocer y prepararnos da pie a que seamos mejores servidores”, concluyó Norma.