La pequeña Fátima, de 7 años, fue reportada como desaparecida el pasado 11 de febrero en el poblado Santiago Tulyehualco, alcaldía Xochimilco. Cinco días después de su desaparición, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México confirmó que se halló el cuerpo de la menor dentro de una bolsa de plástico en la alcaldía de Tláhuac.
El caso de Fátima se dio a conocer una semana después del de Ingrid Escamilla, joven de 25 años, que fue asesinada presuntamente por su pareja sentimental, quien fue detenido en el lugar de los hechos.
“La Iglesia Católica es consciente que estos hechos provocan miedo, enojo y desesperanza entre la población, y se une al pesar que vive la Ciudad de México, además de manifestar su enérgica condena por estos crímenes”, aseguró la Arquidiócesis de México en un comunicado.
La Arquidiócesis elevó una oración por Ingrid, Fátima y sus seres queridos; y asumió el compromiso de fortalecer acciones pastorales que impulsen un ambiente de respeto a la dignidad de toda persona.
Monseñor Alfonso Miranda, Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano, condenó el asesinato de la pequeña de 7 años, y pidió rendirse en la construcción del tejido social.
“Condenamos y lamentamos profundamente el asesinato de la niña Fátima, signo del nivel de degradación al que hemos bajado como sociedad. Nos unimos al dolor de su familia con nuestra oración. No nos demos por vencidos en la reconstrucción del tejido personal y social”, aseguró Monseñor Miranda en su cuenta de Twitter.
Condenamos y lamentamos profundamente el asesinato de la niña Fátima, signo del nivel de degradación al que hemos bajado como sociedad. Nos unimos al dolor de su familia con nuestra oración. No nos demos por vencidos en la reconstrucción del tejido personal y social.
— Alfonso Miranda Guardiola (@monsalfonso) February 17, 2020
Por su parte, Monseñor Salvador González, Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de México, se pronunció sobre el asesinato de Ingrid Escamilla y pidió a las autoridades trabajar para proteger la vida de los más vulnerables.
“En esta semana hemos conocido, siempre por los medios de comunicación, lo que tristemente se ha convertido en nuestro país en lo cotidiano: el asesinato de Ingrid y el de tantas otras mujeres; y la auténtica manifestación a un Estado que da la impresión de no hacer nada o hacer muy poco. De relativizar lo que tendría que estar en primer lugar en su esfuerzo: trabajar por el respeto de la vida de las personas, especialmente las más vulnerables, dígase las mujeres, los niños, los niños en el vientre de sus madres, los enfermos, los migrantes”, dijo el obispo en su homilía en la Catedral Metropolitana.
Además, la Diócesis de Xochimilco también condenó el asesinato la pequeña Fátima y de todas las víctimas de violencia. “El Obispo Andrés Vargas, el clero y los laicos de la Diócesis de Xochimilco, nos unimos al dolor de la familia de Fátima y nos unimos a la exigencia de #JusticiaParaFátima y para todas las víctimas de la injustificable violencia. Oremos por ella y por sus seres queridos”.