Ana María Ibarra
La reflexión sobre el Triduo Pascual fue la temática que el padre Rodolfo Murillo compartió con 160 matrimonios de Asambleas Matrimoniales, en la Asamblea Inter Parroquial del viernes 22 de marzo.
En punto de las ocho de la noche, los matrimonios se congregaron en la parroquia Nuestra Señora de la Paz, en la colonia Tierra Nueva, para su Asamblea Inter Parroquial, iniciando con alabanza y oración.
“Semana Santa de conversión y oración matrimonial y familiar” fue el tema que impartió el padre Rodolfo Murillo, párroco de la comunidad Jesús El Salvador.
En su reflexión, el sacerdote lamentó que en la actualidad se ha sacado a Dios de la vida personal y familias y que la Semana Santa es esperada como un tiempo de descanso y de vacaciones.
Asimismo, añadió que las familias toman este tiempo para hacer fiestas o reuniones familiares y de amigos y se ha dejado de santificar estos días, para socializar.
Por lo anterior, el padre Rodolfo invitó a los asistentes a que, de manera personal, matrimonial y familiar, vivan la Semana Santa como un momento de oración.
Valorar el Triduo
De manera especial, el padre Rodolfo los motivó a vivir el triduo pascual que inicia el Jueves Santo con la institución de la Eucaristía, la bendición del pan y la humildad del lavatorio de los pies, siendo el llamado principal a ser humildes en sus familias y con los que los rodean.
En cuanto al Viernes Santo, el sacerdote los impulsó a acompañar a Jesús en el Viacrucis, el camino de dolor hacia la Cruz, y más tarde, estar junto a la Virgen María en la celebración del pésame a la Virgen Dolorosa.
De igual manera, los alentó a continuar el Sábado Santo en familia y en comunidad asistiendo a la misa solemne del Sábado Santo -Vigilia Pascual-, haciendo conciencia de lo que Cristo Jesús ha hecho en cada uno de ellos y en sus familias.
Matrimonios de oración
Ana y Eduardo Jara, presidentes diocesanos de Congreso de Matrimonios, compartieron que esta asamblea se vivió con mucha alegría y reflexión con el tema que les impartió el sacerdote, y después con una bonita convivencia entre los hermanos de diferentes parroquias, quienes se saludaron con aprecio y amor fraterno.
“Resaltamos la invitación que nos hizo el sacerdote a que seamos matrimonios y familias de oración, entregados a los pies de Jesús, «Porque no hay mejor lugar que estar a los pies de Jesús», expresaron.
En nombre de su director espiritual, monseñor Mariano Mosqueda y el equipo de discernimiento de Congreso de Matrimonios Católicos, el matrimonio Jara agradeció a la Parroquia Nuestra Señora de la Esperanza por recibir con mucha alegría y amor a todos los asistentes.
“También agradecemos al padre Murillo por su apoyo al compartir esta hermosa reflexión y a todas las asambleas de matrimonios por su asistencia”.