Ana María Ibarra
Ana Karen Sánchez tiene 23 años y desde enero del presente año imparte pláticas para quinceañeras en la parroquia Santo Tomás Apóstol, donde las atiende dos sábados seguidos para compartirles enseñanzas y tratar de acercarlas al amor de Jesús.
En entrevista con Presencia, Ana Karen explicó que el primer sábado las quinceañeras acuden solas y a ellas les habla sobre el don de la vida y de que no únicamente el día de sus XV años deben acudir a agradecer por la vida, sino que se tiene que agradecer todo el tiempo.
“Les hago hincapié en que es importante tener una relación permanente con Dios y que deben de reconocer el don de tener un Padre, que es Dios. Se les habla de que deben amarse ellas mismas y respetarse”, compartió la joven.
La catequista dijo que se intenta hacer ver a las quinceañeras que si se aman a sí mismas y reconocen el valor que tienen ante los ojos de Dios, deben cuidarse del aborto, de las drogas, del alcoholismo y de un noviazgo que les haga daño.
“También se les da un tema sobre lo importante que es ser una mujer católica, y que como tal pueden hacer un cambio en la sociedad”, agregó.
Durante el segundo sábado, Ana Karen trabaja con papás, padrinos y chambelanes, a quienes imparte tres temas: Bautismo, Reconciliación y Eucaristía.
“El objetivo es que comprendan la importancia de cada uno de estos sacramentos, que tengan un acercamiento con cada uno de ellos, porque la mayoría de estas familias dejan de venir muchos años a la Iglesia y, lamentablemente, vienen nada más este día por la fiesta”, lamentó Karen.
“Es una experiencia muy bonita trabajar con papás porque veo en sus caras que están sorprendidos. A veces ellos no toman la Eucaristía o la Reconciliación y no valoran lo bello que es el perdón y la misericordia del Señor”, expresó la joven, quien forma parte de la Pastoral Juvenil.
Invitación
Convencida de que Dios la eligió para este ministerio, Karen dijo que procura aprovechar las pláticas para quinceañeras para invitar a las muchachas a que se integren a la comunidad parroquial. Y aunque no han logrado resultados en este sentido, está convencida que debe seguir insistiendo.
“En ese momento entienden y dicen que sí, pero lamentablemente no vemos que sigan viniendo, sólo las que son servidoras, o que están en Confirmaciones asisten”.
Para Karen el material que se utiliza en su parroquia, Santo Tomás Apóstol, es muy completo, sin embargo el tiempo no es suficiente.
“Son personas que no se acercan a la Iglesia y ver estos temas en solo dos sábados se les queda solo en el cumplimiento del requisito, tendría que ser una preparación de más tiempo”, afirmó.
E invitó: “Quince años se cumplen sólo una vez en la vida, también 16 y 17, pero de lo que debemos estar conscientes es de que la vida es un don que se nos regala día a día”. “Agradezcan diariamente a Dios por su familia, por la vida. Sean amigas de Jesús, platiquen con Él. No solo se acerquen ese día, sino vivan un encuentro permanente con Dios”, puntualizó.