Ana María Ibarra
Un grupo de laicos acompañados por el padre Leonardo García, acudieron al Encuentro Nacional de La Sociedad Mexicana de Liturgistas, en su edición número 42, que se llevó a cabo del 3 al 6 de enero en el Centro Juan Pablo II de la Diócesis de San Juan de los Lagos, en el Estado de Jalisco.
A esta semana de estudio, oración y convivencia fueron convocados todos los servidores de liturgia.
“Ordinariamente acudíamos arriba de 300, pero ahora por el tema de la pandemia acudimos aproximadamente 100 personas. El encuentro fue híbrido, una parte presencial y otros lo siguieron a través de las redes sociales”, dijo el sacerdote.
Una pastoral de Encuentro
El padre Leonardo compartió que el primer día del encuentro se llevó a cabo una misa en la Basílica de San Juan de los Lagos, presidida por monseñor Víctor Sánchez, arzobispo de Puebla, encargado de la Comisión de Pastoral Litúrgica del Episcopado.
La dinámica diaria iniciaba con la oración de Laudes, para luego pasar a las ponencias y momentos de encuentro a la hora de los alimentos.
Uno de los temas fue sobre cómo ayudar a la liturgia a reavivar las celebraciones litúrgicas en esta postpandemia.
“La propuesta que se hace desde la Dimensión de la Pastoral Litúrgica de la CEM, en concreto, es retomar la iniciación cristiana en la pastoral: cómo la iniciación cristiana nos puede ayudar a revitalizar nuestras comunidades parroquiales”, compartió el padre Leonardo.
Lo anterior implica reconocer que la Iglesia necesita pasar de una pastoral sacramentalista, a una pastoral de encuentro con el Señor Jesús, una pastoral de procesos, explicó.
“El Bautismo, la Confirmación y la Eucaristía son los sacramentos que forman a un cristiano para que viva una vida cristiana. Debemos dejar de dar sacramentos, en una pastoral sacramentalista, porque la Iglesia no es para dar sacramentos, es para vivir el proceso del encuentro con el Señor Jesús y donde uno va abrazando la fe y el deseo de ser cristiano”.
“Por eso los cursos exprés que la gente busca cuando se va a casar, no deberían de existir”, sentenció.
“Esto nos implica cambiar toda nuestra estructura pastoral y es un tema bastante interesante y denso para que pastores y laicos comprometidos lo reflexionemos y podamos entrarle a esta pastoral. Lo que el Papa Juan Pablo II llamaba: vayan y evangelicen a los bautizados”.
Un reto actual
Otros temas en el encuentro fueron relativos al ritual de la penitencia y ritual de exequias. Igualmente abordaron el reto de ayudar a las comunidades parroquiales a revitalizarse con la iniciación cristiana y a dar el paso de dejar la comodidad de las transmisiones de la Eucaristía, a la participación en las comunidades parroquiales.
“Ya es tiempo de retomar el encuentro con los hermanos”, se comentó en este encuentro de Liturgia.
“La liturgia son signos visibles sensibles, por eso lo virtual nunca será real. Por eso es importante retomar la vivencia en nuestras comunidades parroquiales”, finalizó padre Leonardo.