Diana Adriano
El Santuario de San Lorenzo se convirtió en el escenario de la celebración de la XXXI Jornada Mundial del Enfermo, que se realizó el pasado 11 de febrero, con el objetivo de reconocer el valor de las personas que sufren enfermedades, así como de sus cuidadores.
A cargo de la Pastoral de la Salud y el grupo Camino al Cielo, la conmemoración incluyó diversas actividades, entre las que destacó la unción a los enfermos a cargo del obispo don J. Guadalupe Torres Campos.
Llamado de caridad
La celebración contó con la presencia de un gran número de personas, tanto enfermos, como familiares y amigos que los acompañaron.
“Estamos muy agradecidos con Dios porque nos dio un buen día, con un buen clima, para que los familiares pudieran sacar a sus enfermos, y los pudieran traer a sus pies, a Él que es el médico del alma”, dijo Tula Varela, integrante de Camino al Cielo.
Durante la celebración de la Santa Misa, el obispo recordó que esta jornada lleva el lema ‘Cuida de él, la compasión como ejercicio sinodal de sanación’. Dijo que el evento pretende ser una muestra de solidaridad y consuelo para quienes padecen enfermedades.
“El Santo Padre nos invita a orar por los enfermos, a celebrar la fe, pero también nos pide a todos mayor atención hacia ellos, caridad y presencia, no sólo la oración”, dijo el obispo.
Distintos momentos
Previo a la misa se impartió el sacramento de la Reconciliación a los enfermos que quisieran recibirlo, para encontrar en Cristo la paz y fortaleza necesarias para afrontar sus dolencias. Se contó con la participación de ocho sacerdotes, encabezados por el padre Felipe Juárez, asesor de la Pastoral de la Salud,.
También hubo Hora Santa, en la que los presentes oraron y reflexionaron, además de que clamaron a Dios por la salud de los enfermos, por sus cuidadores y por todos aquellos que dedican su vida a ayudar a quienes sufren.
Como se sabe, la Jornada Mundial del Enfermo es una celebración que se lleva a cabo en todo el mundo y que tiene como objetivo mostrar la cercanía de la Iglesia con quienes sufren enfermedades, así como promover la solidaridad y el compromiso con los más necesitados.
En Ciudad Juárez, hace ya varios años el evento se ha realizado en el Santuario de San Lorenzo, que se erige como espacio de paz y de esperanza para quienes padecen enfermedades, así como para quienes los cuidan.