Tras cumplirse seis años de la visita del Santo Padre al CERESO núm. 3, los internos recordaron lo vivido con una emotiva liturgia organizada por la Pastoral Penitenciaria.
Diana Adriano
La Pastoral Penitencia no quiso pasar desapercibida la fecha del 17 de febrero, pues como se sabe, ese día se cumplieron seis años de la visita del Santo Padre a la frontera, sin embargo, ellos recordaron especialmente el encuentro del Papa con todas las personas privadas de su libertad.
Fue así que el padre Gilberto Pérez, asesor diocesano de la Pastoral Penitenciaria, organizó junto a su equipo de pastoral, un pequeño encuentro con los internos del Centro de Readaptación Social 3, donde rememoraron este acontecimiento.
Durante este encuentro, los internos de cada área se dieron cita en la capilla Cristo el Salvador, ahí el padre Gilberto ofreció el sacramento de la Reconciliación a quién lo necesitara. Acto seguido, se dispusieron a vivir la Santa Misa.
Un gran jubileo
En su mensaje, el presbítero recordó las frases más emblemáticas mencionadas por el Papa aquel día.
Una de ellas fue…“Celebrar el Jubileo de la misericordia con ustedes es aprender a no quedar presos del pasado, del ayer. Es aprender a abrir la puerta al futuro, al mañana; es creer que las cosas pueden ser diferentes”, palabras del Santo Padre en su visita al Centro de Readaptación Social en Juárez.
“Sabemos que muchos hemos cometido errores, unos más grandes que otros, y tal vez humanamente no podemos zafarnos de eso, sin embargo, debo recordarles que Dios en su infinita misericordia, nos perdona, nos ofrece un perdón infinito”, compartió el sacerdote.
Señaló, que mientras las personas no conozcan a Cristo siempre va a haber maldad y errores, por eso, los internos tienen la tarea de predicar a Cristo con su ejemplo de conversión.
“Yo los invito a no dudar del perdón de Dios, recordemos las palabras del Papa Francisco, ‘No te preguntes por qué estás aquí sino para qué’, y que este ‘para qué’ nos lleve adelante, pero siempre de la mano de Él”, añadió el presbítero.
Regalo especial.
Asimismo, recordaron el significado del regalo del Santo Padre para la capilla de Cristo el Salvador, una cruz de cristal.
La imagen de cristal de un Cristo crucificado, “que demuestra la fragilidad de la humanidad y sin embargo con esa fragilidad nos ayuda, nos saca adelante, nos abre las puertas”, compartió el Papa Francisco en aquella ocasión..
Después de la celebración Eucarística, los internos recordaron la visita del Papa Francisco por medio de videos y fotografías tomadas ese día, mientras se disfrutaba de una rica merienda, acompañada de un momento de convivencia.
