Ana María Ibarra
Renovados y con el compromiso de continuar llenando su vida de Dios, es como salieron los doce participantes del retiro que el movimiento Lazos de Amor Mariano realizó del 13 al 15 de septiembre en la Casa de Ejercicios.
Cada uno de ellos salió consciente de los cambios a realizar en su vida y que, de alguna manera van a percibir en sus familias.
Sergio, padre de familia, compartió que se había negado la oportunidad de asistir a un retiro, aun cuando su hija Dafne es parte del movimiento Lazos de Amor Mariano.
“Quiero dar las gracias a este equipo de soldados. Este retiro se iba a cancelar por falta de asistentes, pero por las oraciones del equipo, se realizó. Me había negado en otros retiros, porque no tenía tiempo, siempre había un pretexto”, compartió.
Reconoció que en su vida ha tenido momentos de gozo, pero momentáneos, ya que al final algo faltaba en su vida.
“Eran momentos de cotorreo y de vicio. Me creía el mejor papá del mundo y me faltaba darle el sí a Dios y a lo que realmente importa que es esta familia”, señaló.
Metafóricamente, Sergio expresó que salió del retiro con ‘el tanque lleno’, sin embargo dijo que ‘debe seguir llegando a las estaciones para que no le falte gasolina’.
“Salgo con disponibilidad para tomar el tiempo para escuchar a mis hijos. Ellos ya vivieron el retiro y hubo un cambio en nuestra familia, pero había huecos, porque la cabeza de familia, que soy yo, andaba en el mundo buscando placeres momentáneos”, reconoció.
Y concluyó: “Dios no se equivoca, Él sabe cuál es el tiempo para decirle: aquí estoy”.
Andrés Robles y Marlene Caballero, son los Misioneros de Lazos de Amor Mariano que coordinan el movimiento en la diócesis desde hace ocho años, mismo tiempo en que el movimiento llegó a Ciudad Juárez.
Compartieron que el objetivo del retiro es hacer consciente a la persona de esa vida de unión con Jesús y con Dios.
“Les hablamos de las postrimerías, que son estas realidades últimas del ser humano: el cielo, el infierno, el purgatorio, el juicio. Que se vaya formando la consciencia de la persona de que viene a vivir una experiencia de fe y se le da a conocer la misericordia de Dios”, explicó Andrés.
En esta toma de conciencia, la Virgen María tiene un papel muy importante.
“No es solo la emoción de vivir un fin de semana, sino una convicción que se arraiga en el alma para vivir su fe de manera más radical de la mano de la Virgen María”, agregó Andrés.
Después del retiro se invita a las personas a seguir formándose llevando una preparación para la consagración total a Jesús por María.
“Es una preparación de nueve meses. Una clase cada semana. La consagración es renovar nuestro compromiso bautismal de la mano de María”, explicó el entrevistado.
Pero el proceso para la consagración está abierto para todas las personas.
“El retiro puede vivirlo cualquier persona mayor de 14 años. A la consagración pueden asistir desde los 12 años. Los invitamos a que se animen a vivir esta experiencia”, concluyó.
Formación para consagración:
Sábados a las 4:30 en capilla Santa María Goretti
Miércoles a las 6:00 de la tarde en la parroquia Nuestra Señora de la Paz.
Retiro:
Del 11 al 13 de octubre.
Casa de Ejercicios
Informes al tel. 656 457 3211 y 656 651 4672