Con el armonioso sonido de la canción “De colores”, integrantes de este movimiento retomaron actividades presenciales con momentos de reflexión y convivencia.
Diana Adriano
Tras vivir más de un año sin actividades presenciales que reuniera a todos los cursillistas de la diócesis, el pasado 20 y 21 de agosto se vivió un retiro titulado “Ven y vive la alegría del reencuentro de Cursillos”.
El evento reunió a más de 70 personas en la parroquia Verbo Encarnado y en la capilla Nuestra Señora de la Soledad, cuyo párroco, Bernardo Sánchez, es asesor diocesano del movimiento.
Tema para motivar
Néstor Velázquez, presidente de Movimiento de Cursillos en la Diócesis de Ciudad Juárez, informó que este retiro reunió a cursillistas que en diferente año y en diferente curso vivieron su Cursillo.
“Hablamos de cursillistas que tienen más de 40 años que vivieron la experiencia y otros antes de comenzar la pandemia. Ellos han expresado que se sienten muy gustosos de acompañarnos en este encuentro”, señaló.
Durante este retiro de reencuentro y por medio de temas y dinámicas, los servidores se encargaron de hacerles recordar la experiencia del Cursillo, para que así les naciera el deseo de reincorporarse al servicio.
Como se sabe, la verdadera misión del cursillista se da al insertarse en las parroquias y a trabajar por su comunidad, ya sea en catequesis o animando a la gente a la conversión, ayudando a que otros conozcan el mensaje de Cristo.
“Considerando también la iniciativa de Cursillos a nivel nacional, que todo aquel cursillista que esté retirado de sus actividades o apostolado, se reincorpore, y retomen aquel compromiso que hicieron, ya que Cristo confíó en nosotros para servirle”, expresó Néstor.
Comprometidos
Debido a la pandemia y preocupándose por la salud de los asistentes y sus servidores, el Movimiento de Cursillos de Cristiandad hizo presente todas las medidas para prevenir un posible contagio.
El encuentro de este año ha sido de mucha importancia para el movimiento, pues se notó la gracia de Dios que hace su trabajo en todos los participantes.
“Hemos visto que ellos están comprometidos en seguir trabajando para el Reino de Dios en su ambiente y en las parroquias, dando una respuesta clara de fidelidad como cursillistas”, finalizó el presidente del movimiento.
Al concluir el encuentro, todos se dispusieron a vivir una cena convivencia donde agradecieron la participación de todos los asistentes.