Ana María Ibarra
Salir al encuentro de quien más lo necesita y unirse fraternalmente como comunidad fueron los principales objetivos que impulsaron a la comunidad de la parroquia Dios Padre, junto con su párroco, el padre Jorge Iglesias, a vivir un Adviento en salida llevando cenas navideñas a albergues, hospitales e incluso en algunas avenidas de la ciudad.
Jóvenes de confirmaciones, servidores y pequeñas comunidades se unieron el pasado 23 de diciembre en alguna casa, otros en los salones y en la cocina de la parroquia para elaborar tamales, buñuelos y champurrado, todo esto para compartir con aquellos rostros de Dios sufriente.
Generosa entrega
Solidarios y compasivos, los fieles de la parroquia Dios Padre participaron en este acto de caridad con alegría, sin importar el frío que azotó ese viernes.
En distintos momentos del día, los servidores se cruzaron en los salones parroquiales mientras hacían entrega de los alimentos para que jóvenes empaquetaran los tamales y buñuelos. Con los rostros cansados, pero esbozado una sonrisa, no hizo falta decir palabras, sus miradas reflejaban el amor y la fraternidad, así como el gozo de poder ayudar.
Después el arduo trabajo, los grupos designados para la entrega, repartieron 4 mil 150 tamales, más de mil 300 buñuelos y termos de 20 litros de champurrado en la Casa del Migrante, el CRAEM, Hospital General, Hospital de la Mujer, Hospitales del Seguro Social 6 y 35, Casa Barrios Unidos, y a migrantes e indigentes en la Avenida Juárez, además de adultos mayores y enfermos de la misma comunidad.
La entrega se realizó desde la noche del 23 de diciembre y durante el día 24 de diciembre.
De esta manera, aproximadamente mil personas se vieron beneficiadas y recibieron un plato de comida y un vaso de bebida caliente.
Párroco emocionado
Visiblemente emocionado y agradecido con su comunidad por la respuesta, el padre Jorge Iglesia felicitó y agradeció a su comunidad, tanto a los grupos y pequeñas comunidades que participaron en la elaboración de los alimentos como a los fieles que hicieron donativos para que esta actividad se llevara a cabo.
“Es una bendición tener una comunidad tan generosa como la nuestra que con amor quiere ayudar a los más necesitados. Gracias de corazón y los invito a seguirnos formando en la caridad y que nos distingamos en generosidad para con los hermanos”, expresó el padre Jorge al final de una de sus misas.
Dar y recibir
Otra actividad solidaria que realizó la comunidad de Dios Padre fue la entrega de juguetes, ropa de invierno, tamales, buñuelos y champurrado a las familias más necesitadas del sector parroquial.
Esta actividad estuvo a cargo del ministerio de caridad y se llevó a cabo en la capilla de Santo Niño de Atocha.
Guadalupe Castillo, coordinadora, compartió que el objetivo fue dar a quienes más lo necesitan no solo el alimento físico, sino también el alimento espiritual.
«Somos 30 personas que integramos el ministerio de caridad y entre todos aportamos para ayudar a estos hermanos, además de que recibimos ropa de una dependencia de gobierno y otras personas externas, anónimas, que quisieron apoyar en esta noble causa”, expresó la coordinadora del ministerio.
Ofrecer ese pequeño regalo fue también con la intención de sembrar una pequeña semilla en el corazón de los beneficiados que quizá no conocen a Dios.
Para amenizar la entrega, se contó con un show de payasos que divirtió a los niños y con algunas dinámicas se les obsequiaron también juguetes.
Contentos, tanto los organizadores como aquellas familias que se vieron beneficiadas, compartieron un momento agradable, dejando a todos alegría en el corazón.