Diana Adriano
En un evento lleno de fe, cientos de personas se reunieron el pasado 9 de agosto en el parque frente al antiguo Galgódromo de Ciudad Juárez para dar inicio a la tradicional peregrinación en honor a San Lorenzo, co patrono de la diócesis.
La peregrinación, que marcó el inicio de las Fiestas de San Lorenzo, fue encabezada por la venerada imagen del santo, la cual resguarda un relicario con un diminuto fragmento de hueso de un dedo de San Lorenzo, traído desde Roma a Juárez por el sacerdote Jesús Palma (QEPD).
Con el fervor característico de esta celebración, los fieles comenzaron su marcha desde el parque, llevando consigo sus oraciones e intenciones personales. Cada paso que daban no solo los acercaba al Santuario de San Lorenzo, sino que simbolizaba un avance en su vida de fe.
A lo largo del recorrido, que incluyó la calle Vicente Guerrero y la calle Laguna de Tamiahua, los participantes entonaron cánticos y elevaron oraciones, creando un ambiente de espiritualidad y comunión.
Este acto de devoción es una tradición profundamente arraigada en la comunidad juarense, y cada año reúne a personas de todas las edades que, con gran emoción, se unen en un camino de fe.
Palpable fervor
Al llegar al templo, que desde los días previos fue rodeado por todo el folklor de la fiesta patronal, los fieles se encontraron con la animada verbena, con más gente que se unió para disfrutar de las festividades.
El sonido de los tambores y los cascabeles resonó en el aire mientras los matachines, con sus trajes coloridos y elaborados, ofrecían su danza tradicional, como muestra de devoción que se repite año con año.
Además, los asistentes compartieron la tradicional reliquia, un gesto de generosidad y comunidad que une a los presentes. Se repartieron aguas a los peregrinos, quienes agotados, pero satisfechos, arribaban al santuario después de la larga caminata.
Llamado a la Santidad
La jornada continuó a las 10 de la noche, cuando el obispo José Guadalupe Torres Campos subió al balcón del santuario para presidir la celebración Eucarística, acompañado del padre Alfredo Abdo Rohana, rector del Santuario.
En esta misa el obispo instó a los fieles a vivir la santidad y el servicio como valores centrales de su fe.
«Santo, diácono, servidor, mártir, testigo, hoy con esta fiesta estamos llamados a la santidad, no se les olvide», dijo el obispo, destacando que San Lorenzo no solo es un modelo de fe, sino también un símbolo de servicio y sacrificio.
Don Guadalupe recordó que “San Lorenzo hoy más que nunca nos llama a ser mártires, a ser testigos de Cristo, con la Palabra y con las obras y ¿por qué no?, si es el caso, con la sangre y el martirio”.
Enfatizó que en tiempos de crisis global, nacional y local, es muy importante mantener una fe firme y una esperanza inquebrantable, siguiendo el ejemplo del santo.
«Nunca debemos perder la fe, como San Lorenzo que tenía una fe inquebrantable. Nunca debemos perder la esperanza ante la adversidad, ante los obstáculos y los enemigos», concluyó el obispo.
Esa misma jornada, a la medianoche, se celebró otra Eucaristía como Misa de Gallo en honor a San Lorenzo, y al dia siguiente, 10 de agosto, el templo siguió recibiendo a los cientos de peregrinos que llegaron para agradecerle favores o pedírselos por intercesión.