La escuela primaria se ubica en el poniente de la ciudad y fue fundada por el primer obispo de Ciudad Juárez, don Manuel Talamás Camandari.
Ana María Ibarra
En el marco de la festividad de San Marcelino de Champagnat, fundador de la Congregación de Hermanos Maristas, la comunidad educativa del Colegio Isabel C. de Talamás celebró su 50 aniversario con una misa presidida por el obispo diocesano don J. Guadalupe Torres Campos y concelebrada por el padre Alejandro Martínez, párroco de la comunidad San Vicente de Paúl, en cuyo territorio está ubicado el colegio.
Fundada por primer obispo
Contento por formar parte de este festejo, el obispo saludó y agradeció a los maestros por la invitación, y a algunos padres de familia que se dieron cita en el plantel para la celebración.
“Saludo a quienes nos acompañan aquí presencial y a través de la transmisión de Facebook. Gracias hermanos maristas”, saludó el obispo.
Antes de iniciar la celebración se leyó una breve semblanza de la institución, fundada en 1970, cuando don Manuel Talamás Camandari, primero obispo de Ciudad Juárez, vio como tierra fértil aquel sector del poniente para sembrar la semilla de la educación, motivado por el ejemplo de San Marcelino de Champagnat.
En su homilía, monseñor Torres resaltó el ejemplo de Jesús como maestro que enseña y transmite con la palabra y la verdad.
“Jesús nos invita a todos, de una u otra manera, a ser maestros, ser educadores, guiar al otro en la verdad. Educarlo en los conocimientos del mundo, en la ciencia, en el arte. Pero ser maestros va más allá: serlo en el servicio, en el bien. Sin duda alguna, San Marcelino encontró en Cristo el ejemplo para su obra”, expresó el obispo.
Resaltando la sensibilidad que san Marcelino tuvo para con los niños y jóvenes desamparados, el obispo señaló que en las escuelas maristas de Ciudad Juárez sigue viva la obra de San Marcelino.
“50 años de este colegio es toda una vida. ¡Cuántas generaciones han pasado! Hoy agradecemos a Dios el don de esta escuela, pedimos por el señor obispo don Manuel Talamás, por su familia y los iniciadores de esta obra. ¡qué gran aniversario! Es un compromiso a ejemplo de San Marcelino, modelo de santidad”, exclamó.
Reconocen a maestros
Al finalizar la Eucaristía, se llevó a cabo la entrega de preseas a los maestros que llevan más de 10 años laborando en el plantel.
Los reconocimientos fueron para Juan Antonio Palomino con 20 años de trayectoria en el colegio; además de reconocer la labor de 10 años de las maestras América Isabel Hernández, Laura Lizette Valenzuela, María Casas Lira y el maestro Hugo Alberto Hernández.
Recibieron las preseas de manos del obispo diocesano, quien después de dar la bendición final, se dirigió, junto con los directivos del plantel, al interior del edificio para bendecirlo.
Llenos de alegría, la comunidad marista representada con los maestros y padres de familia que acudieron, realizaron un significativo brindis por los 50 años del colegio y compartieron un momento degustando un refrigerio mientras un Mariachi amenizaba el momento.
En frase…
“Los felicito, son una gran familia marista. Nuestra diócesis es bendecida por su labor, por su carisma. El Señor les siga fortaleciendo en esta misión maestros a ejemplo de Jesús Maestro”
Mons. J. Guadalupe Torres Campos