Diana Adriano
Durante nueve días, la comunidad de la parroquia San Felipe de Jesús brindó momentos de alegría y fomentó la convivencia social en época navideña entre las familias del sector parroquial, con la realización de las Posadas Navideñas.
Rescatar tradiciones
La hermana Carmen Núñez, religiosa dominica de la Doctrina Cristiana, fue la encargada de dirigir estas festividades, las cuales se realizaron del 16 al 24 de diciembre.
Ella explicó que estas posadas aluden al peregrinaje que María y José realizaron cuando ella estaba a punto de dar a luz a Jesús.
La religiosa consideró que más allá de dar espacio a figuras comerciales, como el tradicional Santa Claus u otros personajes creados para el consumismo, se debe rescatar la identidad y destacar las tradiciones católicas.
“Estamos muy contentos de realizar este novenario de posadas, pues nos ayudan a que la tradición no muera y se las podamos inculcar a los niños, quienes se han visto muy emocionados al asistir. Damos gracias al padre Juan Carlos por siempre apoyar en las iniciativas”, expresó la hermana Carmen.
Detalles de alegría
“En el nombre del cielo, os pido posada, pues no puede andar, mi esposa amada”, es la primera estrofa del villancico que entonaron los peregrinos a las afueras del templo, ubicado en la calle Costa Rica, pidiendo posada para la Virgen María y su esposo, San José, pues el niño Jesús está a punto de nacer.
La tradición de las Posadas dicta que se hacen visitas a una o dos casas en busca de albergue, en las que se les niega, hasta que reciben aposento en la morada que organiza la fiesta.
“Hemos querido que todos los grupos parroquiales participen, por lo que cada día es un ministerio diferente al que le toca estar dirigiendo el rezo y la meditación. Estas posadas nos ayudan a unirnos como comunidad parroquial, en familia, y de que entiendan que el mayor regalo que nos ha dado Dios, es su Hijo Jesús”, agregó la religiosa.
Las piñatas, series de luces multicolores, dulces, villancicos, chocolate caliente, etcétera, fueron algunos detalles que pudieron disfrutar los miembros de la comunidad, quienes se mostraron llenos de alegría.
Este tradicional novenario concluyó el 24 de diciembre con la santa misa de 7:00 de la tarde en el templo parroquial, presidida por el padre Juan Carlos López, párroco de la comunidad.
“Ha sido un año de mucho trabajo y de cambios para la sociedad, pero este tiempo nos trae la esperanza que necesitamos para continuar con la misión que se nos ha encomendado. Deseamos a las familias que pasen una Navidad feliz en compañía de sus seres queridos y que el año nuevo sea próspero para todos”, concluyó la hermana Carmen.