Ana María Ibarra
Con una misa y una bonita ceremonia, niños del Colegio Montessori Baudelio Pelayo, ubicado en el poniente de la ciudad, celebraron su graduación el pasado 5 de julio. Catorce de los graduandos fueron del grado de preescolar y cinco de primaria.
¡Graduados!
La misa se realizó en la capilla La Medalla Milagrosa, perteneciente a la parroquia San Carlos Borromeo y fue presidida por el párroco, padre Pedro Luis Reyes, quien al inicio de la celebración pidió por los graduados, los padres de familia y las maestras.
El sacerdote resaltó que la celebración coincidió con el primer viernes de mes dedicado a la Divina Providencia y al Sagrado Corazón de Jesús.
De igual manera, el padre Pedro Luis resaltó el esfuerzo que cada alumno tuvo que realizar para alcanzar la meta de concluir su formación.
“Ustedes niños han dado un paso, con esa confianza se han demostrado que sí pueden. El trabajo también es de parte de sus maestros, las maestras se esfuerzan, de parte de la mamá, del papá también hay un esfuerzo”, dijo el sacerdote.
El padre Pedro Luis los invitó a pedir a Dios y darle gracias por la vida y por lo que han conseguido.
Su historia
La escuela Baudelio Pelayo tiene 19 años de haber sido fundada por la hermana Mariana Bustillos, religiosa Misionera de María Dolorosa. Cuenta con un sistema Montessori para preescolar y primaria.
“La madre Mariana nos traspasó la escuela al Centro Comunitario Integral Las Alitas. En el 2019 iniciamos pláticas. Al principio se nos hacía mucho trabajo, porque tenemos el Banco de Comida de Dios, tenemos el centro Las Alitas en el Valle de Juárez. Vimos que la educación es parte de nuestro ministerio y la aceptamos en plena pandemia”, dijo Ramona Marrufo, quien junto con su esposo Armando Solano coordinan la asociación Las Alitas.
Junto con esta escuela, Ramona y su esposo, recibieron también otros centros fundados por la religiosa: el Centro la Dolorosa, donde se dan clases del ICHEA para adultos, y la catequesis Del Buen Pastor.
“Los niños que se graduaron ya tiene su primera comunión gracias a la catequesis del Buen Pastor, los niños del coro son parte del taller de música de la escuela Baudelio Pelayo. Estamos muy contentos y agradecidos con Dios por esta gran labor que nos encomendó y agradecidos con la hermana Mariana por la confianza”, expresó.
Ramona dijo que se han enfrentado a diferentes retos, sin embargo se han sentido favorecidos por Dios.
“Queremos que los niños tengan acceso a la educación de calidad. Creemos que la educación los puede salvar. En esta zona hay mucha violencia, carencias. Nos encomendamos a las oraciones de la comunidad. Todos los que trabajamos aquí lo hacemos con mucho amor. Decía María Montessori: hay que educar para la paz”, finalizó.