Hoy miles de personas están visitando a sus seres queridos que pasaron a otra vida, al conmemorarse el 2 de noviembre la fiesta de los Fieles Difuntos.
Con este motivo presentamos este artículo del Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México con algunas preguntas y respuestas sobre los difuntos.
¿Los difuntos pueden seguir viviendo en este mundo?
No. Este mundo material y terreno es para la vida humana como tal. Cuando la persona muere, su cuerpo o sus restos permanecen en el mundo, pero su espíritu se encuentra con Dios para recibir un juicio sobre su vida. Por este juicio la persona merecerá el cielo o el infierno, o una etapa transitoria llamada purgatorio. Es falso que Dios permita que el alma de una persona vague por el mundo sin definir su situación final.
¿Dios permite a los difuntos realizar venganzas o espantos?
No. Una vez terminada la etapa terrena del ser humano, su espíritu deja este mundo. Aunque la fantasía popular piense que las personas que murieron enojadas o por causa de la maldad de alguien pueden vengarse y hacer justicia, esto no es cierto. Dios no puede permitir a un difunto dañar a vivos, queriendo hacer su propia justicia. Después de la muerte es Dios el único que realiza la justicia y da a cada uno lo que se merece.
3. ¿Pueden los muertos realizar travesuras como jalar los pies?
Si el alma o espíritu se separa del cuerpo, el alma deja de tener huesos, músculos, etc. para poder tocar a las personas. Por lo tanto, es imposible que un difunto pueda tocar, jalar o mover algo. Es muy común que las personas miedosas y fácilmente sugestionables sientan que alguien las toca o les jala los pies, pero ¿para qué permitiría Dios a un difunto hacer travesuras? o ¿qué supuesto mensaje pretendería dar el difunto haciendo eso?
¿Es cierto que un muerto se le puede subir a alguien?
Algunas personas dicen que “sienten que se les sube el muerto” cuando están acostadas y dormidas. La mayoría de ellas son miedosas y sugestionables. Es muy común que cuando alguien está presionado por problemas refleje durante el periodo de sueño su angustia y ésta se manifieste en sensaciones de opresión del corazón o falta de aire. Por eso cuando las personas despiertan tienen la sensación de que tuvieron un peso encima.
¿Es necesario ponerles comida a los difuntos?
Los alimentos son para satisfacer el hambre del cuerpo. Si el cuerpo ya ha muerto no necesita de alimentos ni tampoco de otros elementos como vestido, medicinas, etc. En algunas culturas que no conocen el Evangelio predicado por el Hijo de Dios creen que las almas siguen necesitando de alimento y que vagan hambrienta y sedienta por el mundo. Por eso aprovechan la “Fiesta de los fieles difuntos” para ofrecer alimento a sus seres queridos que ya fallecieron. Pero… Si las almas necesitaran alimento, entonces ¿por qué no les ofrecen alimentos durante todo el año?, ¿por qué dejan a los familiares difuntos “morirse de hambre” durante todo el año? Los alimentos que se colocan en las ofrendas de muertos tiene, más bien, un sentido de comunión con nuestros difuntos.
Con la predicación de Cristo sabemos que los fieles difuntos que ya han llegado a Dios no necesitan nada de los humanos porque Dios los hace inmensamente felices. Y los fieles difuntos que aún se encuentran en el purgatorio, no necesitan alimentos materiales, sino la oración y la aplicación de la Santa Misa por ellos.
¿Es cierto que una persona que murió embrujada no puede descansar?
El eterno descanso y la vida eterna para los difuntos no depende de las supuestas brujerías o magias del ser humano, sino de las buenas acciones del cristiano y de la redención que nos ofrece Cristo. Nunca puede ser más grande el poder humano que el de Dios.