Mujeres siguen en Ciudad Juárez esta especial devoción mariana, traída a América Latina por el Papa Francisco y poco conocida en la diócesis…
Diana Adriano
Un grupo de mujeres católicas de Ciudad Juárez viven y celebran una especial devoción mariana, poco conocida en la diócesis local. Se trata de la devoción a Nuestra Señora Desatadora de Nudos (María Knotenlöserin).
“Cuando conocí a esta advocación mariana, me di cuenta que todos tenemos nudos en nuestra vida y quién mejor que María, que es nuestra Madre, para desatarlos”, dijo Laura Contreras de Ortega, quien coordina a este grupo de mujeres en tan especial devoción, traída a América por el Papa Francisco.
Historia de la devoción
La devoción a María Desatadora de Nudos comenzó en Alemania, en 1615.
Se sabe que en el siglo XVII, la costumbre en Alemania para quienes contraían matrimonio era usar un listón blanco durante la ceremonia religiosa. A los esposos se les ataban las manos para simbolizar una nueva comunión de vida, y conforme iban surgiendo los problemas, le iban haciendo nudos al listón.
Hubo una joven pareja que llevaba tres años de matrimonio y pasaba por una severa crisis que los llevaría al divorcio. Pero antes de tomar una decisión final, la pareja decidió visitar a un sacerdote jesuita austriaco, Jakob Rem, para pedirle consejo y oraciones. La mujer entregó al sacerdote su cinta de boda, en la cual había hecho un nudo por cada discusión que tuvo con su esposo.
El padre Jakob, un gran devoto mariano, rezó por ellos frente al cuadro de Nuestra Señora de las Nieves. Con la cinta en sus manos, pidió a la Virgen que desatara los nudos, que representaban las dificultades maritales que la pareja estaba experimentando.
De repente, vio cómo los nudos se desataron milagrosamente, uno tras otro, hasta que la cinta volvió a estar perfectamente lisa. Los cónyuges se reconciliaron y vivieron un matrimonio feliz por el resto de sus vidas.
En 1700, el sacerdote Jérôme Ambroise von Langenmantel, nieto de la mencionada pareja, mandó hacer una pintura alusiva a este milagro, para reforzar la devoción a la Santísima Virgen.
La Virgen Desatanudos (Johann Georg Melchior Schmidtner -1700) representa a la Inmaculada Concepción con una corona de dos estrellas en su cabeza, una luna bajo sus pies y el lazo que tiene entre sus manos. La imagen original se encuentra actualmente en la iglesia de San Peter am Perlach en Augsburgo, Alemania.
Se le conoce como María Desatadora de Nudos o Nuestra Señora Knotenlöserin
De acuerdo a los expertos, el fundamento teológico de la imagen de esta pintura, corresponde al siglo III, con san Irineo, quien señalaba que Eva ató a todos los seres humanos en el nudo del pecado original, y la Nueva Eva, que es María, los desató al traer al mundo al Salvador.
Llegó a Ciudad Juárez
Laura Contreras, impulsora en Ciudad Juárez de la devoción, explicó que esta advocación de María se refiere a los nudos como una referencia a los problemas que entorpecen la relación entre Dios y los hombres. Y esas dificultades son representadas por una larga cinta con nudos grandes y pequeños, imagen del pecado que impide que la gracia de Dios fluya.
Dijo que esta advocación de María es conocida también como «la Madre del Buen Consejo” y “patrona de los matrimonios y de los conflictos en la vida de las personas y pueblos”.
“En 2012, una persona de El Paso me enseñó esta devoción con unas oraciones muy bonitas. Al profundizar un poco más, nos dimos cuenta que existía un novenario y otras oraciones que hacían alusión a esta advocación mariana”, compartió Laura.
Fue así que junto a un grupo de mujeres católicas comenzaron a rezar el novenario por sus esposos en algunas parroquias de El Paso, y luego en Ciudad Juárez.
“Llegamos con esta idea a la diócesis en septiembre de 2018, desde ese momento las hermanas Misioneras de María Dolorosa nos acogieron y nos apoyaron”, añadió.
Siguen en oración
En Ciudad Juárez Laura se encargó de propagar esta devoción mariana. En poco tiempo, eran varias las mujeres que se reunían en la capilla de San Antonio, en Senecú, para rezar. Sin embargo la pandemia llegó y el grupo se redujo, aunque la devoción no terminó.
“Son cuatro años en los que hemos visto a las personas muy contentas. Muchas veces queremos ver los milagros inmediatamente pero entendemos que los tiempos de Dios son perfectos. Sin embargo, claro que hemos visto cambios, especialmente en los matrimonios”, recalcó la entrevistada.
Con el retorno a las actividades presenciales tras dos años de pandemia, Laura, junto con sus compañeras de grupo, han regresado a la capilla San Antonio, con las Misioneras de María Dolorosa, para seguir rezando por las necesidades de las personas.
“Hoy que nuestra nación se encuentra en medio de una grave crisis y en diversos conflictos, rezamos con fe profunda a Nuestra Señora Desatanudos para que desate con eficacia los nudos que envuelven a nuestra nación y nos libre de las divisiones que tanto daño nos hacen”, concluyó la entrevistada.
La Virgen Desatanudos en México
El padre Luis Pablo Garza, fundador del Santuario de la Virgen Desatadora de Nudos, en Cancún, México, explicó en una entrevista que la devoción fue llevada hace varias décadas de Alemania a Argentina por el Papa Francisco, cuando era sacerdote en Buenos Aires.
El Padre Jorge Mario Bergoglio se dedicó a difundir la imagen a través de tarjetas y cuando fue nombrado Obispo Auxiliar de Buenos Aires, consiguió colocar una imagen de ella en la Parroquia San José del Talán.
“De ahí, la devoción fue llevada a Brasil por un piloto francés, y en este país se le construyó un santuario”, dijo el padre Luis Pablo.
“Yo la conocí en Brasil. Me di cuenta de que los fieles le tenían un especial cariño a la imagen, así que viajé a Alemania y visité la Iglesia donde está el cuadro original, para enterarme más de su historia. Ahí además obtuve una réplica de la imagen”, contó.
En el año 2015, el padre Luis Pablo colocó la imagen que trajo de Alemania bajo una humilde carpa, en Cancún, Quintana Roo, donde comenzó a celebrar misas. Luego, en 2016, durante su visita a San Cristóbal de las Casas, (Chiapas) el Papa Francisco bendijo una primera piedra, que el padre Luis Pablo llevó a Cancún para iniciar la construcción del santuario, el cual finalmente quedó hecho en madera.
Único en México
El santuario se encuentra enclavado en la selva quintanarroense. Es único en su tipo en México, un verdadero edén hasta donde llegan fieles de todas partes del mundo para conocer a la virgen y pedirle milagros.
Uno de los aspectos que llama más la atención de los visitantes es que la bienvenida al santuario la dan cientos de listones blancos que se encuentran atados por todos lados y donde los fieles escriben sus intenciones o dificultades.
Cuando el milagro es concedido, los devotos regresan y colocan un listón de color con el agradecimiento. Tantas personas acuden, que se tuvo que construir La Plaza de los Agradecimientos.
Únete a rezar en Ciudad Juárez
Si te interesa unirte en oración por alguna intención especial pidiendo a Nuestra Señora Desatanudos, puedes acudir todos los jueves a la capilla San Antonio, ubicada en calle Baudelio Pelayo en Senecú. Reunión de 12 del medio día a 1:15 de la tarde.
Más información al contacto 656 409 74 37